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Suzuka pov:

Llegamos a la escuela con tiempo de sobra, las miradas sobre nosotras una vez más. Abracé a Moa por la cintura y sonreí con indulgencia ante los susurros, los dedos señalando y los ojos siguiendo nuestro recorrido.

-Parece como si nos quisieran secuestrar y violar con tantas miradas- Yui sonrió y le guiñó el ojo a varios chicos.

-Hey, no puedes hacer eso Mizuno- Riho la miró con el ceño fruncido -Tú me perteneces, no tienes derecho a coquetear con otros-

-Oblígame- la miró provocadora.

-Ven acá maldita puta- la agarró de la cintura y literalmente le comió la boca.

-Que hormonadas- Moa sonrió y se humedeció los labios.

-Porno gratis nena- Momoko caminaba de espaldas viendo la escena -No se quejen y disfruten mientras se puede-

-Habrá que comprar como veinte cajas de condones y pastillas- Saya se rió y negó divertida -¿Quién las manda a ser tan pajeras entre ustedes?-

-Ellas nos pueden mucho- sonreí y pegué a Moa a mi cuerpo -Si tuvieras pareja nos entenderías, tal vez hasta participarías en nuestras charlas-

-¿Charlas de qué?- preguntó Saya muy curiosa.

-De como nos gusta cogernos a nuestras omegas, de como las deseamos- me reí al ver la cara roja de Moa.

-Mejor no, no quiero relatos eróticos- puso falsa cara de asco y se rió.

Las otras dos se separaron después de un sensual espectáculo de besos, Yui tenía la cara y los labios rojísimos mientras Riho sonreía triunfante.

-Así aprenderás a no mirar a nadie más Mizuno- le dio una nalgada y la apretó contra su cuerpo.

-Creo que los demás mirarán a Yui- Momoko señaló al tumulto que se había formado, todos estaban con los celulares grabando descaradamente.

-Es mía putos, pueden mirar pero no tocar- les levantó el dedo medio y se acercó a nosotras.

-¿Ahora sí podemos entrar?- pregunté divertida y besé la cabeza de Moa -Mientras ustedes gastaban saliva nosotras nos aburrimos lo indecible-

-¿Y quién las manda a quedarse mirando?- Yui sonrió y arregló el pelo -No se quejaron mucho-

-Yo tengo derecho, no la pongo desde que Kano quedó embarazada- Momoko hizo puchero y entramos todas juntas, con las miradas en nuestra espalda.

-¿Y por qué debías embarazarla tan pronto?- Saya se rió.

-Fue calentura del momento, era su primer celo y algo que ella ansiaba, yo solo me dejé llevar- se puso roja y todas nos reímos -No es gracioso hijas de puta, el sexo es vital para mi instinto Alfa y lo necesito con urgencia-

-Pues consíguete otra omega Okazaki- me encogí de hombros y la golpeé con cariño -Hay muchas que van detrás de tu miembro-

-No se puede hacer eso, ¿Te volviste loca?- me empujó visiblemente molesta -Kano me pondrá de patitas en la calle si se enterara de que me cogí a otra omega solo porque hace tiempo no tenemos sexo-

-Solo era una idea imbécil, no te sulfures- me reí de su cara.

-Algún día te romperé la cara, empezando por tus orejas de Dumbo- me señaló y me tiró de la oreja.

-¡Ay!- hice puchero y traté de aflojarle los dedos -mis orejitas son sensibles Momo-

-¿No pueden dejar de pelear ni de provocarse mutuamente?- Saya suspiró y nos separó fácilmente -¿La convivencia y cooperación pacífica no existe?-

Feromonas y heroína (TEMPORADA UNO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora