Suzuka pov:
Estos últimos días había estado teniendo un sentimiento raro en el pecho, como si estuviera por ocurrir algo. Al principio había decidido ignorar eso, pero este día en particular no podía estar tranquila ni quedarme quieta, estaba muy nerviosa y no sabía por qué.
-Cariño, ¿Me estás escuchando?- Moa movió la mano frente a mis ojos -¿Hola? Tierra llamando a Suzuka-
-Perdona- sacudí la cabeza y sonreí algo apenada -¿Qué me decías?-
-Tu madre nos está llamando para desayunar- sonrió y terminó de arreglarse la ropa -¿Qué te tiene tan distraída? Te hablaba y no parecías prestarme atención-
-No es nada- negué con vehemencia y me levanté de un salto de la cama -Solo estoy algo pensativa-
-Lo he notado- acarició mi espalda y besó mi mejilla -¿Es algo de lo que quieres hablar?-
-Tranquila- la besé y la abracé por la cintura -Todo está bien, no te preocupes por mi cabeza- sonreí para tranquilizarla.
-Sabes que puedes hablar conmigo, ¿Verdad?- los ojos de Moa brillaban con amor.
-Lo sé hermosa- le di otro beso y salimos juntas de la habitación -Tú eres muy sensata y me escuchas sin juzgarme-
-He llegado a entenderte muy bien- palmeó mi hombro con cariño.
Entramos a la cocina justo cuando estaban terminando de poner la mesa.
-Buenos días mis niñas- mamá sonrió y nos saludó con un beso -Vayan sentándose-
-Te llegaron paquetes y cartas- dijo Momoko bebiendo de su taza y me señaló el montón de la mesa.
-Nunca me llegan tantas cosas- fruncí levemente el ceño y me senté, agarré la cuchara y me puse a desayunar.
Los paquetes eran cosas nuevas para la casa, las cartas no eran nada del otro mundo hasta que llegué a la última.
-No puede ser- la cuchara cayó haciendo mucho ruido, atrayendo las miradas de todas -No, no, no-
-¿Y a ti qué te pasa?- Yui me miró con el ceño fruncido.
-Es una carta de mi abuela- señalé el escudo de la familia impreso en el sobre.
-¿La vieja maldita de la que tanto te quejas?- Riho comió de su tostada.
Abrí el sobre con manos temblorosas y la carta mecanografiada parecía brillar como un cartel rojo ante mis ojos. Me puse a leerla en silencio:
Suzuka:
Me eneré por obra de tu padre y de Yuri que tienes una nueva omega, esta vez de verdad, solo espero que no sea otro de tus juegos y que no sigas poniendo en ridículo a la familia, manchando el renombrado apellido Nakamoto con tu inutilidad y tu habilidad para hacer las cosas difíciles. Esta noche, a las 20:40pm, nos reuniremos en la mansión toda la familia, espero contar con tu presencia y la de tu clan, que todos podamos conocer a tu nueva compañera. No lo arruines y no nos pongas en vergüenza, que tu gente se comporte y que la nueva muchacha tenga decencia, es de buena familia después de todo ¿Verdad? Aunque nunca escuché de su apellido, no debí haber buscado muy bien al parecer.
Hablaremos de su permanencia en la familia después, por ahora quiero ver si será buena para ti y si puede darme bisnietos puros, hay que mantener la buena rama siempre.
Tu abuela, madame Nakamoto Yuka.
Mordí mi labio inferior, mis manos temblaban y sentía como el odio crecía en mi interior como la lava de un volcán.
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Feromonas y heroína (TEMPORADA UNO)
JugendliteraturMoa es una joven omega adicta a la heroína y Suzuka, una Alfa temida y conocida por ser hija de la mafia, la soborna con darle su ansiada droga si hace los "trabajitos" que le pide...