Ahora nos Perteneces. [Heikazuscara]

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- ¿Quién era ella...? - cuestionó el pecoso llegando al lugar con una media luna entre sus manos, observando a la peliazul alejarse a lo lejos 

- ... No lo sé - hizo un gesto con los hombros expresando su ignorancia - dijo que yo no sabía y se fue - explicó recordando las palabras de la chica: "E-entonces... ¿Tu no lo sabes...? —al observar su expresion entre confusion y desinterés descubrió su respuesta— M-me tengo que ir ¡Ah... se me hace tarde! Adiós..." que rara... pensó; pero no le daría mas vueltas al asunto, lo que mas le importaba eran sus estudios, los consideraba una distracción del exterior 

- Bueno, ha de ser una fan - dijo rompiendo la bolsita que portaba el sorbito del jugo

- Cállate - dijo aburrido, su mayor preocupación era encontrarse con un seguidor en un centro público... lo sigue siendo.

- Oye son y 5 - avisó refiriendose a la hora 

- Cierto - encendió su celular y entró a la foto del cartel - Tengo economía

- ¿Y yo? - cuestionó espectante

- No sé, fijate - apagó el celular y lo guardo en su bolsillo para hacer lo mismo con las cosas que tenía sobre la mesa

- ¿Qué te costaba...? - encendió su celular y se fijó - "Neurobiología y adaptación"... ¿Qué carajo es eso?

- En eso no puedo ayudarte, adiós - saludó y se fue del lugar rumbo a su nuevo salón temporal, no le agradaba mucho la idea de compartir salón con diferentes personas en cada materia pero tampoco podía quejarse, eligió esa universidad para ir caminando y no tener que soportar al chofer de su madre espiandolo...

Fueron dos módulos de economía y seguidos dos modulos más de derecho civil en otro salón, estaba seguro de que algun día se cansaría de ir de un salón a otro en un mismo día...
De hecho, ya empezaba a casarse.

- Ah... - suspiró agotado, empezaba a dolerle la espalda por la desacostumbre, caminaba hacia la calle con la intención de salir de la institución con la energía que suponía el primer día de clases: -5

- ¡¡Kuni!! - gritó una voz desde lejos, se notaba algo enojada por verlo irse

- ... ¿Eh...? - se volteó para encontrarse con un pecoso caminando decididamente hacia él

- ¿No sientes que te olvidas de algo...? - sonrió; el contrario lo miro de pies a cabeza serio, adivinando que se sentía indignado por no haberlo esperado, pero cuando estuvo a punto de vocabular un «No» el contrario volvió a hablar - ¡Yo no! Bueno, ¡no solo yo! - dijo para alcanzarlo y comenzar a caminar junto a él; le mostró su celular - me acaban de llamar, dicen que el gato ya está, quieren hablar conmigo, contigo. - comunicó  aclarando que el interesado realmente no era él

- Bueno

- Ya te estabas olvidando de ese bicho - puso sus manos por encima de su cabeza y sonrió divertido

- Iba para allá 

- Ajá ajá

No eran mas de dos cuadras, y en esas dos cuadras completas el pecoso nunca se quedó sin tema de conversación, Kuni no sabía como hacía. Podía estar 5 minutos hablando solo si él no se dignaba a contestarle, y eso era lo más irritante.

- ¿Ya te enteraste que la semana que viene comienza a ser obligatorio tu presencia en un club?

- Que molesto...

- Si. ¿verdad? Pero bueno esto me puede ayudar a encontrar algo que si me guste

- No me refería solo a eso...