𝑼𝒏 𝑷𝒂𝒔𝒐 𝒂𝒍 𝑨𝒎𝒐𝒓 | 𝑴𝒂𝒍𝒌𝒐𝒄𝒐𝒈𝒍𝒖 𝑩𝒂𝒍𝒊 𝑩𝒆𝒚 | TERMINADA

𝕯𝖔𝖑𝖔𝖗 𝖊𝖓 𝖊𝖑 𝖈𝖔𝖗𝖆𝖟𝖔𝖓

Al día siguiente ambos se habían tomado la libertad de reunirse en los jardines privados de su padre, tenían que asegurar su acuerdo.

— Estaré agradecida toda vida Malkocoglu.

La sonrisa sale de sus labios mientras caminan por el gran jardín donde habían ido para poder hablar tranquilamente.

— Aún nadie lo sabe, pero en cuanto eso pase se iniciarán con los preparativos para la boda y querrán hacerlo rápido.

— Sultana.

— Se que después de todas las fiestas su majestad nos otorgará el palacio Beylerbeyi.

— Necesito decirle algo.

— Ya estoy pensando en que nos puede separar y..

— Sultana. — se detiene frente a ella silenciado sus palabras — Tengo algunas reglas antes de empezar todo esto.

— Si.. — compone su postura — por supuesto, te escucho.

— Primero, deberá decirme cuanto tiempo tardará en liberarme.

— No lo tengo claro aún. En.. ¿Ocho meses esta bien? — su suspiro cae para asentir estando de acuerdo.

— Bien, segundo, no voy a tocarla, ni ahora, ni en la boda, ni después.

— Uf.. — muestra un quejido fruncido su ceño — ¿Quien te dijo que pasaría algo así? Tu jamás pondrás tus manos barbaras sobre mi.— el Pasha deja ver una mueca por sus últimas palabras, comenzaba a arrepentirse.

— Y tercero, no podrá prohibirme nada, si no acabo con todo..

— Alá dame paciencia. — pide al cielo, tenía que aceptarlo, ese era su única salida. — Bien, esta bien, como tu quieras.

— Si hago esto es solo porque quiero volver a mi hogar Sultana.

— Bien, entiendo, no me des explicaciones además tu.. — sus palabras callan cuando ve a una furiosa Mihrimah caminar hacia ellos — Oh mi Alá, ayúdame..

La profunda mirada del Pasha gira hacia la dirección de los almendrados ojos donde se percata de tal caos, respira fuerte dándose valentía, seguramente ya lo sabía.

— Hermana querida..

— ¿Enserió me harás esto? — la misma mirada de furia que tenia su madre podía persivirlo en su hermana — ¿Como te atreves?

— Mihrimah debes escucharme y comprenderás por..

— ¿Este es tu modo de ayudarme? Te conté todo y mira como te comportas, por Alá juro que seras infeliz y no tendrás días buenos

— Silencio. — sus palabras había llegado a enfadarla — Cuida como me hablas, estas frente a tu sultana, frente a tu hermana mayor. — baja la mirada llena de ira, deseaba decirle muchas cosas, pero eso sería castigado, la pelinegra ve al Pasha incómodo —  Espérame, seguiremos hablando..

— Sultanas. — se inclina alejandose unos metros, los necesarios para no escuchar.

— No vuelvas a faltarme el respecto porque antes que tu hermana soy tu sultana.

— No comprendo. — niega ignorando sus palabras — Abrí mi corazón contigo, sabes todo lo que siento por Malkocoglu y a pesar de ello serás tu quien te cases con él.

— Llegaste a mi con insolencia, si tan solo hubiera sido al contrario sabrías todo. — se acerca para mirarla con suma fuerza — No tengo que recordarte quien soy cada vez que tu comportamiento sea hostil.