¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
彡.。🎀 capitulo siete: Aiko y su madre
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
EN MEDIO DE LA OSCURIDAD DE LA NOCHE, una joven albina de ojos rojos se acerca a un puesto de comidas en las cercanías de Sendai. A pesar de la hora tardía, lleva puestos unos lentes oscuros que ocultan parcialmente sus ojos rojos, creando un aire de misterio en su apariencia.
Su cabello blanco como la nieve brilla ligeramente bajo la luz tenue del puesto de comidas, y su piel pálida resalta en la penumbra. Viste con un atuendo común, con una chaqueta deportiva que la protege del frío de la noche. La joven irradia confianza mientras se acerca al puesto, lista para disfrutar de una deliciosa comida en este rincón de Sendai a altas horas de la noche.
▬▬¡Aaaiiikooo!▬▬la voz alegre de la de ojos carmín asusta a los demás comensales, que dan un respingo al verla tomar asiento a un lado de estos en el puesto.
▬▬Oye...¿no es la de ojos de demonio?▬▬logra oír la pequeña albina a la lejanía, sintiéndose incómoda levemente.
▬▬¡Cállate, niña! ¡Asustas a los clientes!▬▬una jóven castaña, que no pareciera superar los 19, la golpea con un trapo con el que anteriormente secaba algunos tazones.▬▬¿Escapaste de tu padre otra vez?
Ikari intentó no demostrar su tristeza. Ella y su madre eran las únicas que cuidaron de ella cuando se encontraba sola en ese apartamento en Sendai, además de su tía Shoko y Nanami. Su padre la dejaba a su suerte con Azumi, su cuidadora, desde los 9 años y contando, pero Azumi no era una gran cuidadora. Solía dormir días enteros emborrachándose y llorando por su triste matrimonio fallido.
Gracias a eso, siempre era una discusión con su padre por un cambio de cuidadora, a Satoru no le importaba y solía ignorarla o ordenarle que se fuera a su habitación.
Las quería con el alma a Aiko y su madre por siempre estar para ella.
▬▬Sí... no importa¿Cómo has estado? Pasó bastante de que no venía y ayer cumplí 12.▬▬la niña sonríe inocentemente cambiando el tema.
▬▬Felicidades, supongo. ▬▬La mujer suspira al ver la niña acomodar sus lentes oscuros, ya que le quedaban grandes aún; un regalo adelantado de nanami.▬▬espera aquí, mamá ya debe de regresar pronto. Fue por tus fideos favoritos, tiene ese extraño instinto que sabe cuándo vas a llegar.