Capítulo 22

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La puta ama.

Scarlett.

Antes de salir del hospital.

No puedo creer que no le de un poco de vergüenza pronunciar el nombre de Gema, salí del lugar hechando humo de las orejas, tras de que vine aquí, tiene el puto descaro de mencionarla. Siento como alguien me detiene del brazo, volteo para ver al ministro.

-¿Qué quieres?- Suelto enojada.

-No te vas a ir- Demanda.

-Mira Alex, no estamos en la puta central para que me des órdenes, no creas que tienes algún poder sobre mi solo porque follamos, eso no te da ningún derecho para decirme lo que tengo que hacer.

-¿Qué mierda te pasa?- Suelta con enojo- Pensé que ustedes no estaban juntos, pero tu demuestras otra cosa.

-No te confundas, no tenemos nada, pero lo que paso hace rato no debió suceder, así que ahora dejame irme a mi casa, no quiero oír tus reclamos, ni tampoco quiero estar cerca de tu hijo.

Por fin suelta mi brazo, pero cuando estoy a punto de salir vuelve a tomar mi brazo.

-Bien, puedes irte, pero los escoltas te llevaran, no quiero que algo te suceda.

-Bien.

Alex llama a uno de sus escoltas y le da órdenes de llevarme sana y salva a mi casa, me quedo callada, se que me desquite con él y no era mi intención, pero el que su hijo mencionara a Gema me puso furiosa. Los escoltas me guían a la camioneta y empezamos el viaje hacia mi casa, tardamos media hora, salgo del auto y me despido de los escoltas agradeciendo el que me trajeran, subo por el ascensor y saco mis llaves para abrir la puerta, las luces están apagadas así que supongo que Luisa se durmió, entro a mi habitación y me tiro sobre la cama analizando todo, recibo una llamada.

<<Patrick>>.

Contesto.

-¿Si?- Hablo apenas contestó.

-Carle, ¿Cómo está la puta ama de todos los tiempos?- No puedo evitar soltar una risa.

-Mal, pero ya me vengue de Christopher, solo queda Gema.

-Así se habla, ¿Cuál fue tu venganza pequeña?

-Me acosté con Alex- Suelto despreocupada.

-¿¡Qué!?

-Me acosté con Alex- Repito.

-Si, te escuche, pero no me lo puedo creer, eres la puta ama, enserio, no cualquiera puede follar con dos Morgan, no te sientas triste por Christopher, es un pendejo qué no te supo valorar, pero me va a oír ese idiota, te dejo linda, descansa.

-Igual Patt.

Cuelgo para sumergirme en un sueño profundo.

Al día siguiente me levanto sin muchas ganas, no quiero ir a la central, pero no voy a permitir que me vean destruida, en estos momentos agradezco que Regina me inculcara su filosofía, nadie puede ver que estoy jodida, mucho menos la perra de Gema Lancaster. Las chicas solo conocen mi parte buena, es hora de que todos conozcan mi lado oscuro, el que se satisface al hacer sufrir a la gente. Después de arreglarme, salgo en el auto de Luisa, ya que mi auto se quedo en la central por irme con Alex, así que Luisa me lleva y al regresar cada una va a estar en su carro.

Llegamos a la central y me dirijo a mi dormitorio para cambiarme por el uniforme de entrenamiento, salgo al lugar donde se forma mi tropa, para empezar con el entrenamiento diario, no por nada somos una de las mejores tropas, saludo al capitán cuando llega unos minutos más tarde que yo.

UNA HISTORIA SIN UN ROMEO (En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora