𝗠𝘆 𝗧𝘂𝘁𝗼𝗿; 𝗧𝗼𝗺 𝗞𝗮𝘂𝗹𝗶𝘁𝘇

037

no eres mi dueño
No soy sólo uno de tus muchos juguetes
No digas que no puedo ir con otros chicos
Y no me digas que hacer
No me digas que decir
Y por favor cuando salgo contigo
No me pongas en exhibición porque
no eres mi dueño

Lilian

—Vamos levantate—Escuche su voz firme. Me levanté de la cama lentamente hasta quedar frente a ella—Dime lo que sucedió exactamente—Se cruzó de brazos

—E-El entro a mi habitación y comenzó a besarme. Yo trate de alejarlo pero fue inútil—Dije cabiz baja. Senti su miraba sobre mi, obligandome a verla.

—No quiero que le cuestes a nadie de esto. Estate tranquila no dejaré que se te acerque—Poso su mano sobre mi cabeza

—¿P-Por que?—La mire con lágrimas

—¿Por qué, qué?—Siguió acariciando mi rostro

—¿Por que mierda me tienes aquí?. Es muy claro que tú me secuestraste—La mire con furia. Ella se quedo callada unos segundos hasta que hablo.

—Por que eres mía.y te quiero aqui conmigo. Siempre lo quise así—Me tomo del mentó fuertemente

—¿Quien eres?—La mire fijamente tratando de mirar detrás de esa tela negra

Pero la puerta de la habitación fue abierta dejando ver a Ria. Sonreí al verla.

—Señora la llaman—Dijo mirandome con temor

—Bien. Cuida que no escape. Te amo preciosa—Dijo yendo hacia la puerta, para después cerrarla

—¿Mi niña todo bien?—Me miro con preocupación

—S-Si—Dije débil pero las palabras de la mujer resonaron por mi cabeza. ¿Te amo?. ¿Por qué mierda dijo eso?

—¿Ahora que sucedió?—Me miro a los ojos buscando una respuesta

—N-Nada—Le sonreí lo mejor que pude. No quería decirle lo que sucedió. No quería que me viera como una completa inutil

Tom

Todo estaba listo. El plan salía a la perfección, solo faltaba un día para poder ir por mi pequeña. La tendría de nuevo conmigo pero están vez no la dejaré por nada.

—Mas te vale no abrir la estúpida boca—Katerine amenazó a un tipo con un cuchillo

El asíntio con temor y se marchó dejándonos solos. Nos encontrábamos en la casa de Amy, justo detrás.

—Ella está en la habitación de arriba la más alejada—Me entrego unas llaves

—¿Segura que no hay nadie al alcance?—La mire

—Si, estoy segura la escuche decir eso
—Me sonrió

—Okey, deseame suerte—Cruce los dedos y me adentre a la casa

Es un lugar bastante acojedor como para secuestrar a alguien. Me encamine directo a las escaleras,subí lentamente y sigilosamente, hasta llegar a la dichosa habitación.

Solté un pequeño suspiro y toque la puerta, escuchando un claro "Pase", pero quedé conjelado al escuchar de nuevo su voz. Me adentre, pero me detuve al verla. Ahí sobre el colchón con sus ojos rojos.

—¿T-Tom?—Me miro con confusión pero después sonrió viniendo hacia mi

—Nena—Le sonreí. Me adentre completamente y cerré la puerta detrás de mi

—¡Tom!—Me abrazo fuerte causandome un alivio. Por fin pude sentir paz y tranquilidad, tenerla entre mis brazos es la mejor sensación después de meses.

—Mi pequeña te extrañe tanto—La tomo del menton con delicadeza, obligándola a mirarme

—¿Cómo diste conmigo?—Mire sus ojos océanicos

—Katerine me ayudó—Pero deje de lado ese tema y la bese dulcemente

Sus manos viajaron hacia mi nuca, profundizando más este, obligandome a posar mis manos sobre su cintura pegándole a mi. Pero el maldito aire se hizo presente obligándonos a separarnos.

—Te extrañe tanto. Te amo, Tom—Me dijo mientras me miraba con amor

—También te amo, Ly—La volví a besar pero la puerta fue abierta separandonos al segundo

—¡Katerine!. Dios me asustaste— Abrace a mi pequeña

—¿Katerine?, ¿Pero si ella se llama Ria?—Lilian miro a la castaña confundida

—Lo siento tenía que mentir—Le sonrió a mi pequeña

—¿Pero como se conocen?. ¿Y como es que tu no has avisado que el está aquí?—Nos miro con confucion

—Tranquila amor. Ella es una vieja amiga. Me ayudó a entrar—Me sonrió

—¿Y como me encontraste?—Se recargo sobre mi pecho y me miro fijamente

—Gracias a Bill. El encontró un casa sospechosa a las fueras de la cuidad—Le mire

—Ah, ¿Pero tú sabes quién me tiene aquí?—Miro a Katerine. Ella solo asintió y luego me miro—¿Tu también sabes?—Dijo con una ceja alzada

—Si—Baje la mirada

—¿Y no me dirás?—Me tomo del mentón obligandome a verla. Pero entonces la puerta volvió a abrirse dejándola ver a la pelinegra furiosa

—¿Amy?—Me pequeña la vio con temor y confucion

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¡Oh, gran mierda!

Capitulo treinta y siete, omg porfin sucedió, espero les guste no olviden votar y si gustan comentar los leeré con gusto 🖤

Wheremygoodgirls?