𝗠𝘆 𝗧𝘂𝘁𝗼𝗿; 𝗧𝗼𝗺 𝗞𝗮𝘂𝗹𝗶𝘁𝘇

07

¿Y qué diría la gente?

¿Si escuchan a través del muro?
Quiero hacerte cosas malas

Lilian

Estaba temblando de nervios, volvería a ver a Tom. Después de lo ocurrido, no se cómo seria su reacción, ¿Buena o mala?. Pero me vestí para la ocasión, una falda negra justo un poco más arriba de la rodilla, una playera de tirantes negra y mis converse negros. Mi cabello suelto y un poco de maquillaje.

Sonrei ante el espejo y baje hacia el salón, encontrandome con mi padre y madre.

—Lilian, cariño tu padre y yo saldremos unas horas. Tienes cuidado, Tom vendrá dentro de unos minutos—Dijo mi madre dándome un beso en la frente

Asentí feliz y estos salieron pero antes de que cursarán la puerta, mi padre hablo.

—Tu hermano salió para una cita de trabajo, tardará en llegar. Llámanos si pasa algo—Me miro y yo asentí, tratando de evitar mi felicidad. Salieron por la gran puerta y decidí comer unas deliciosas fresas mientras espero al señor kaulitz.

Después de unos largos 20 minutos llegó gracias al timbre, camine hacia la puerta mostrando mi seriedad. Abrí la puerta encontrandome con su atractivo perfil.

El se güiro y me miro fijamente haciéndome sonrojar disimuladamente.

—Pase, Señor—Dije haciéndome a un lado. Cerré la puerta, diriguiendome hacia el, pero se paró. Algo que me dejó desconcertada.

—¿Tus padres se encuentran?—Me miro serio. Negué mirándolo y este se acercó más hacia mi, haciendo retroceder—¿Tu hermano?—Caminaba hacia mi  lentamente, mirando mis labios

Negué de nuevo hasta topar con pared. Entonces mire al señor kaulitz asustada.

—¿S-Señor que está haciendo?—
Lo mire con nerviosismo

—¿Te crees que puedes hacer eso, frente a todos?. Después irte y ¿Dejarme con un calentón?. ¿Así sin más?—Quedo frente a mi, mirándome serio. Lo mire temblando de nervios y negué—Eres una niña muy mala y las niñas malas merecen un castigo—Se acercó a mis labios.

—Señor..—Me interrumpió

—Calla, mocosa. ¿Era lo que querías o no?—Coloco su dedo sobre mis labios

Yo asenti mientras miraba sus labios. Las grandes manos de Tom me acercaron hacia su pecho sintiendo su respiración sobre mi.

—Nunca debiste insinuarte así, preciosa—Me susurro sobre mis labios

Yo no podía soltar ni una sola palabra, por lo nerviosa que estaba. Pero sus labios se envolvieron sobre los míos, dejándome sorprendida, pero le seguí. Su lengua trataba de envolverse con la mía, dandole acceso. Sus manos descendieron hasta mi trasero donde lo estrujo a su antojo.

Leves jadeos salían de mi, sin poder evitarlo. Tom me jaloneo haciéndome alzar. Enrede mis piernas sobre su cintura mientras nuestras bocas se conocían profundamente.

—Eres tan jodidamente caliente—Dijo entre labios

Volvimos a unir nuestros labios, sintiendo como una mano del mayor descendía hasta mi falda, donde la also dejando al aire mi ropa interior.

—Mmm, encaje. ¿Venías preparada, muñeca?—Me murmuró en mi oído, haciéndome estremecer

Asentí soltando jadeos, pero en cuanto senti sus dedos acariciar mi intimidad, solté un gemido agudo.

Tom acariciaba suavemente mi centro, sintiendo mis bragas mojadas, hasta bajarlas y sacarlas, dejándome totalmente expuesta ante el. Mire como guardaba estás en su bolsa del pantalón trasero. Lo mire sorprendida.

—¡Señor, pero si eso es mio!—Le susurré mientras suspiros salían de mi

Volvió a por mis labios, besando cada rincón de mi. Bajo por mi cuello, donde lo mordió y lametio a su antojo.

Solté un gran gemido al sentir su gran dedo dentro de mi, sujetándome de su nuca. A lo que solté jadeos. Tom, empezó a moverlo dentro y fuera suavemente, sintiendo como su entrepierna despertaba, para después restregarla.

—¡Tom!—Gemi su nombre al sentir otro dedo adentrarse

Entraba y salía lentamente. Cuando de pronto sentí que llegaría a mi climax, entonces gemi alto, mientras Tom gruñía en mi cuello

—¡Tom...voy ahhh!—Solte sintiendo mis fluidos, salir. Hasta dejar sus dedos completamente mojados

Los dos regularizamos nuestras respiraciones mientras este me bajaba

—Asi es como se siente tener un orgasmo, pequeña—Me miro a los ojos. Me ruborice ante sus palabras, pero su mano me tomé del menton—Muñeca, debes prometer que este será nuestro pequeño secreto. Nadie puede enterarse—Me miro serio a lo que asentí lentamente.

Pequeño secreto, yo diría un gran secreto.

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Por fin, sucedió algo entre estos dos

Creo que no soy buena para esto, pero aquí lo tienen, no olviden votar y si gustan comentar los leeré con gusto 🖤

Wheremygoodgirls?