Por azares del destino después de siete años Taehyun se reencuentra con su ex novio y ahora tienen que compartir el mismo departamento... ¿La chispa de su amor seguirá viva? ¿Lograrán convivir juntos sin lastimarse?
🍂 Historia ambientada en Japón...
El fin de semana llegó a su fin, Beomgyu se encontraba tirado en el futón, tenía los cabellos alborotados, las prendas desalineadas y el rostro mojado de lágrimas.
El silencio del hogar era presente, solo se podían escuchar los movimientos de Beomgyu, sus respiraciones y latidos.
Todo el fin de semana fue igual, Beomgyu acostado en el futón sin hacer muchos movimientos, con un cigarrillo en mano el cual le ayudaba a sentirse más relajado. No comer durante dos días no le importó para nada, su estómago no pedía alimento, se sentía abatido, sin ganas de hacer algún movimiento, solo con ganas de dormir y fumar.
Mantenía la mirada hacia el techo, los brazos abiertos y los labios cerrados. Durante todo el fin de semana no se emitió ninguna palabra en ese departamento, estuvo en silencio.
¿Paz o soledad? ¿Qué era? ¿Por qué se sentía tan mal dicho silencio? ¿Por qué el Beomgyu que amaba la paz en esos momentos añoraba una palabra del chico que amaba? Todo era confuso, nada tenía sentido, ¿por qué Beomgyu seguía insistiendo en recuperar el amor de Taehyun?
Un suspiro salió del interior de Beomgyu quien ya estaba más calmado, pasar todo un fin de semana solo había sido de gran ayuda.
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Taehyun abrió los ojos con tranquilidad y lo primero que vió fue un Soobin sin prendas aferrado a su cuerpo. Suspiró algo fastidiado y tapó al contrario con cuidado para no despertarlo.
Vió su celular, aún eran las siete de la mañana, no volvería a llegar tarde. Esta vez sin importarle si Soobin se despertara se levantó de la cama para ponerse la ropa, por fortuna tenía unas cuantas prendas en el departamento de Soobin, utilizaría esas por lo pronto.
Soobin abrió los ojos y bostezó, se aferró a la almohada de Tae, la olió para sentir su aroma y sonrió, se sentía feliz por lo ocurrido la noche anterior, le encantaba la forma en la que Tae y el se entregaban sexualmente, Taehyun era la única persona que lograba hacerlo tan bien.
— ¿Irás a trabajar? ¿Te preparo el desayuno? — preguntó Soobin con una de sus tipicas sonrisas.
Taehyun suspiró antes de mostrarle la mirada a Soobin, ya no podía seguir con esa farsa, no podía seguir siendo tan cobarde...pero aún así no conseguía la forma de decir la verdad.
— No hace falta bebé, desayunaré algo en la escuela... Sigue durmiendo — contestó al estar totalmente cambiado.
Antes de salir de la habitación dejó un pequeño beso en los labios de Soobin, labios pomposos pero no los labios que amaba, labios dulces pero no tanto como los de... Beomgyu.
Beomgyu tuvo que cancelar sus citas, no se sentía apto para hacer su trabajo, sabía que no podía presentarse de esa forma. Es mejor decir "no" si no puedes hacer algo, ser sincero... Después de muchos años Beomgyu entendió eso, la sinceridad duele pero no mata, en cambio mentir... Mentir puede ser dulce pero destructivo, Beomgyu lo sabía a la perfección.
