Amor, lealtad y amistad son tres palabras que definen a Han Jisung toda su vida tenido que cambiarse de casa por el trabajo de su madre pero esta vez su destino le deparará muchas cosas y entre ella conocerá a Lee Minho, aquel chico que con sólo una...
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— El murió... — susurró. — Y fue mi culpa. — su voz pareció quebrarse por un momento.
Acaricie su mejilla, este hizo una pequeña pausa para continuar hablando.
— Decidí dejarlo porque mi padre me amenazó con dejar a mi madre sin nada, me vi obligado andar con una chica "perfecta" según mi padre, una semana después de que termine con mi novio, encontraron su cuerpo sin vida en el lago donde nos dimos nuestro primer beso. — su voz templaba pero no se detenía. — Dejo una carta y lo que más me dolió fue que escribió "yo te necesitaba más que tú a mi" — las lágrimas comenzaron a recorrer sus mejillas.
Sin pensarlo lo abracé, sus lágrimas mojaban mi hombro y su corazón latía más rápido.
— Aun lo amo... — susurro antes de apretar mi cuerpo con fuerza.
Este se separó un poco de mí.
— Estas llorando también. — dijo mientras limpiaba las lágrimas de mis mejillas.
Me sorprendí al tocar mi cara y comprobar que las lagrima se había escapado de mis ojos.
— No sé por qué... solo sé que me siento triste si tú lo estas. — susurre antes de volver abrazarlo.
Me dolía el pecho porque ahora tenía claro que nunca sería el número uno y nunca trataría de ocupar ese lugar.
— Hablemos de otra cosa. — me pidió Minho.
Su voz se escuchaba mejor, creo que lo mejor es cambiar de tema porque nunca es bueno traer a la mente momentos que puedes volverse oscuros.
— De lo que tú quieras porque siempre soy yo el que pregunto. — me queje tratando de sacar a relucir mi personalidad.
Este cogió un shampoo que estaba a su lado y comenzó a mezclarlo en mi cabello.
— Pareces un niño pequeño haciendo una rabieta. — se burló Minho antes de comenzar a jugar con el shampoo en mi cabello.
Este tenía mucho cuidado y se sentía súper relajante que alguien más lavara mi cabello.
— Es quiero sentir que tienes curiosidad de mí, debe haber algo que quieras preguntarme. — exclame.
Cogí un poco de shampoo y aparte sus manos de mi cabello para ser yo el que lavara su cabello rubio.
— ¿Y tu padre por que no vive contigo? — pregunto.
— Es una respuesta fácil, le pago a mi madre para que abortara ya que él tenía una familia que no sabía que tenía una amante. — dije.
Deslice cuidadosamente mis manos en su cabello y me sorprendí al ver que mojado era mucho más largo.
— ¿No lo conoces? — pregunto.
Yo negué de inmediato mi madre nunca me ha prohibido ni ocultado nada sobre él pero desde pequeño nunca necesite nada de alguien que ni quería mi existencia.
