Serpiente¹ - Minsung

58 - Despedida

Han pasado varios meses desde que nos graduamos, realmente fue un día inolvidable y en definitiva de mis mejor momentos en el instituto. Aprendí demasiado al lado de Félix, los dos vivimos muchos momentos buenos y malos, este chico se ha vuelto importante para mí, lo extrañaré mucho.

— Bebe tienes que dejar de llorar, Félix no te puede ver así — dijo antes de abrazarme.

Negué con un puchero, no puedo parar de llorar mi mejor amigo se va y no lo voy a ver durante mucho tiempo.

— No puedo — dije mientras me abrazaba a Dori.

Aquel pequeño gato me daba más consuelo que mi novio.

— Amor, mírame Félix vendrá en vacaciones y los fines de semana cuando tenga tiempo — dijo mientras me quitaba a Dori de los brazos y lo dejaba en el suelo para abrazarme — Te prometo que si él no viene, nosotros vamos pero ya no llores no me gusta verte así — me pidió mientras limpiaba mis lágrimas.

— ¿Me lo prometes? Por el dedito pequeño — dije mientras cogía su meñique para sellar la promesa.

El asintió antes de darme un beso en la frente.

— Haría cualquier cosa para hacerte feliz, te amo — dijo antes de darme un beso rápido en los labios.

¿Cómo no enamorarme de este hombre si se comporta así?

— Yo te amo más — dije antes de envolver mis brazos en su cuerpo.

Estábamos en el aeropuerto, el papá de Félix estaba revisando que tuviera todo los papeles y cosas listas, al parecer su madre y hermanos tenían algo más importante que hacer que despedirse. Que rabia me daba esa mujer y esos niños malcriados.

— ¿Sunno no ha llegado? — pregunto Seonghwa.

Yo negué se suponía que estaría aquí antes que nosotros pero quién sabe qué pasaría.

— Debe estar por llegar — respondió Minho antes de abrazarme por la espalda.

Seonghwa sólo se rio al ver que Minho no disimulaba ni un poco lo celoso que se colocaba.

— Chicos gracias por apoyar a mi hijo — comenzó a decir el padre de Félix con lágrimas en los ojos — Es mi pequeño y no quiero se vaya — dijo antes de comenzar a llorar.

Enserio ese hombre y Félix tienen algo en común, son personas puras, que ternura, el pelinegro lo abrazo tratando de consolar a su padre.

— Ya no llores papá, vendré en vacaciones y hasta mucho antes si no tengo deberes — dijo Félix para tranquilizar a su padre.

Esa escena era muy linda, aquel hombre de cabello rizado y ojos oscuros quiere mucho a su hijo.

— Prométeme que me llamaras — pidió el papá.

Yo estaría ahora igual de llorón que el papá de Félix pero con Minho a mi lado es difícil derrumbarme.

— Lo haré papá, el vuelo saldrá en unos minutos — hizo una pausa el pelinegro para acercarse a nosotros — Gracias Seonghwa por ayudarme con mis maletas — agradeció Félix.

— Cuando quieras, sabes que estoy aquí para ayudar — dijo Seonghwa como siempre muy amable.

Mi madre y el tío Sunghoon querían venir pero les surgió algo en el trabajo así que se despidieron ayer en la noche con una hermosa cena.

— Gracias a todos, enserio me harán mucha falta sus ocurrencias — confesó Félix.

No pude evitar ir a abrazarlo, no quiero dejarlo ir realmente quiero decirle que se quede pero no sería capaz de cortar sus alas nunca porque él tiene derecho de cumplir su sueño.

— Mejores amigos por siempre no te libraras de mis llamadas ¿Ok? — le recordé.

— Lo sé — dijo antes de separarse de mí.

Minho se acercó a él y revolvió su cabello, al igual que yo mi novio quiere mucho a Félix.

— Pase lo que pase cuentas con nosotros, no dudes en llamar nunca ricitos — dijo Minho.

Félix asintió, en definitiva él es el bebé del grupo, es imposible no preocuparnos cuando sabemos que él es muy inocente y puro aunque se quiera hacer el duro.

— Iré a llevar las maletas — aviso el padre de Félix.

Faltaba poco y nada que Sunno llegaba ¿Será que le pasó algo? No creo, las noticias malas son las primeras en llegar. Justo como si lo hubiese llamado con el pensamiento apareció un pelirrojo agitado.

— ¡NO TE VAYAS AÚN! — grito Sunno.

Me aleje, ahora es el momento del pelirrojo.

— Tranquilo todavía no me voy — dijo Félix con burla.

Mire con curiosidad lo que Sunno tenía en la mano, parecía un regalo.

— Ten esto, no lo abras hasta que estés en el avión es una sorpresa — comenzó a decir el pelirrojo — Llegué tarde porque había mucho tráfico — se excusó.

— ¿Y ahora es el momento dónde confiesas tu amor por mí? — cuestionó Félix con diversión.

Mis esperanzas del el shipp Sunlix no se iban aún, vamos no la caguen.

— Enserio andas viendo mucho doramas, no podía dejarte ir sin despedirme de ti — dijo antes acariciar la mejilla de Félix — Aunque no lo diga eres el primer amigo que tuve y sin ti me hubiese vuelto un desastre... te voy a extrañar más de lo que puedo explicar — confeso.

¿Ajá niño y la confesión? No así no me gusta, dile que lo quieres yo sé que sí.

— No quiero que te vayas, quiero decirte que te quedes pero ya elegiste, sabes que estaré ahí para ti, para escuchar tus dramas a cualquier hora no importa, eres muy especial para mí — dijo Sunno.

Félix no dijo nada, estaba llorando, abrazo aquel pelirrojo y ahí supe que los dos estaban siendo cobardes porque ambos sentían más de lo que podían admitir.

— Hijo ya es hora — aviso el padre de Félix.

13/15