41 - No te quiero compartir

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Era el momento, tengo que decirle a Minho lo que está pasando y dejar que él decida lo que quiere hacer

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Era el momento, tengo que decirle a Minho lo que está pasando y dejar que él decida lo que quiere hacer.

Dori se sentó en mi regazo y comencé acariciarlo, hace unos meses ni quería que lo tocará y ahora se la pasa buscando mi toque.

— Eres tan hermoso — le dije al pequeño gato en mis manos, acaricié sus orejas porque sé que le encanta.

Me sonroje al ver a mi rubio tomándome fotos.

— Tu eres hermoso — me halago Minho mientras se acercaba a mí.

Sentí mis mejillas arder por la vergüenza.

Acarició mi cabello antes de sentarse a mi lado en el sofá y colocar una de sus manos en mis piernas descubiertas.

Solo tenía puesto una camisa grande de rayas y mi bóxer.

— Mentiroso, tú mismo dijiste que era feo — me queje.

Hice un puchero enojado porque hace unas semanas había estado en mi cuarto y me dijo que yo no tenía nada de especial.

— No sabía apreciar tu belleza — respondió antes de acariciar a Dori que se estaba quedando dormido en mis piernas.

— Que parlero eres— me burle— ¿Que te gusta de mí físicamente? A ver si te creo — lo rete.

Una parte de mi quería se quedar así para siempre con él y la otra me recordaba que tengo que decirle lo de su ex.

— Tus piernas... no sé qué estás haciendo pero cada día se ven más apetecibles, tu trasero es perfecto apretado y caliente, tus labios carnosos — dijo mientras acariciaba con sutileza cada lugar que mencionaba.

Podía jurar que en estos momentos parezco un tomate y ni hablar de la creciente erección escondida en mis pantalones.

— ¿Y de mi personalidad o mi forma de ser que te gusta? — pregunte.

Dori se levantó de mi regazo y se fue a dormir a su cama.

Me senté en sus piernas, podía sentir su pecho en mi espalda y su barbilla apoyada en mi hombro, sus brazos me rodearon para acercarme más a él.

— Me gusta que no eres el típico niño llorón y malcriado, la forma en la me miras a los ojos, sin temor me encanta — comenzó a decir — Me gusta que cuides a Félix porque eso me demuestra que eres un amigo fiel, me fascina que manejes varios idiomas aunque no te des cuenta te ves extremadamente sexy hablando en francés. Y sobre todo me gusta que eres sincero — dijo.

Esto último me hizo tener el impulso de decirle lo de Seungmin de inmediato.

— ¿Y qué te gusta de mí? — me preguntó.

Le voy a decir la verdad pero solo no quiero romper este momento con él.

— La primera vez que te vi quedé cautivado con tus ojos, tus tatuajes me fascinan, tu cuerpo parece esculpido por los mismo ángeles no entiendo cómo puede tener esos músculos si comes demasiado dulces, tu piel no tiene ni una imperfección... realmente físicamente me gusta cada centímetro de ti — confesé — Tu personalidad es otro tema porque me molesta que eres muy seco a veces, me gusta que seas seguro de ti mismo y créeme que tú inteligencia me cautiva mucho más que tú físico, aun no entiendo cómo puedes saber tanto si te la pasas durmiendo en clases — exclamé.

Serpiente¹ - MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora