Aprendiendo a ser padre

Capitulo 24

Los personajes de la época de los merodeadores pertenecen a J.K. Rowling solo unos pocos son de mi imaginación.
(⁠๑⁠♡⁠⌓⁠♡⁠๑⁠)

Bueno más sorpresas llegaron a Harry cuando su cumpleaños se acercó cada vez más, cuando el verano había comenzado se había encontrado con una serpiente negra en el jardín mientras atendía las plantas de Tía Petunia. La serpiente era amable y ambos se habían hecho amigos muy rápido, Repetidas veces mencionaba que podía morder a sus tíos ya que era venenosa pero Harry no la dejaba, no quería que murieran e ir a parar a un orfanato. Luego las cartas comenzaron a llegar siendo dirigidas a el, Sus tíos estaban decididos a que el no debía leerlas pero la curiosidad era más fuerte que nada y había hecho hasta lo imposible para tener una.

-¿Quien tiene tanto deseo de contactarse contigo?- Pregunto Dudley confundido mientras ambos espiaban a Tío Vernon y Tía Petunia.

-Esta situación me está dando más curiosidad- Dijo su serpiente escondida en la manga de Harry.

Poco a poco Tío Vernon se había estado volviendo más y más loco hasta que la avalancha de Cartas salió de la chimenea, En menos de una hora todos estaban en el Auto huyendo de Privet Drive ¿De que se escondían? Ni Harry, ni Dudley lo sabían. Llegaron a un hotel horrible, luego al bosque, A un mirador y al final terminaron en una choza en terribles condiciones en el océano, Bueno era definitivo que Tío Vernon se había vuelto completamente loco. Su serpiente, Reagan, estaba emocionada por el cumpleaños número 11 de Harry, tanto que dibujo un pastel de cumpleaños algo chueco en el polvo del suelo, Harry soltó una pequeña risita mientras veía al reptil intentar hacerlo bien. Cuando Dieron las 12:00am toda la cabaña se estremeció, alguien estaba llamando a la puerta, Harry y Dudley se levantaron de un salto mientras Tío Vernon y Tía Petunia bajaban las escaleras, Tío Vernon con un Rifle en mano. La puerta se estremeció una mes más haciendo que la cabaña temblará, Harry dió un paso atrás mientras Reagan enseñaba los colmillos lista para saltar sobre quién se atreva a tocar a su humano. Un hombre gigante atravesó el umbral cuando la puerta finalmente cayó al suelo, La tormenta a fuera se calmó un poco mientras toda la familia observaba al recién llegado.

El hombre de Nombre Hagrid había Sido muy amable, Lo que a Harry más le había gustado era la forma en la que trataba a los Dursley siempre defendiendo a Harry de ellos. Reagan se apretó más en la muñeca de Harry haciéndole un poco de daño pero estaba preparada para defenderlo pase lo que pase, La mención de sus padres lo había hecho feliz pero algo incómodo. Al escuchar sobre su madre de boca de Tía Petunia sentía que algo andaba mal, No el hecho de que la insultara si no la forma en la que menciono que sus madres se casaron, eso le hacía sentir extraño como si pensara que había alguien a quien traicionaba por llamar a Lily Evans su madre. La cola de Cerdo había Sido lo mejor y luego abandonando la cabaña se fue con Hagrid emocionado por saber sobre el mundo mágico, tenía tantas preguntas y no sabía como formularlas.

Unas horas después al despertar y estar listos para irse, Harry caminaba por londres detrás de Hagrid observando su lista de Útiles para la escuela, Se escuchaban los Siseos de Reagan en su Manga no sabía que estaba diciendo pues había demasiado ruido alrededor, Se acercaron a un edificio oscuro que parecía un bar "El caldero Chorreante", Harry tenía la sensación de que solo ellos podían verlo, caminaron entre la multitud y se acercaron a un hombre que estaba tras la barra.

-¡Hey, Hagrid! ¿Lo de siempre?- Pregunto el hombre con una sonrisa, parecía que todos conocían a Hagrid.

-Ahora no Tom, estoy cumpliendo asuntos de Hogwarts... Traje a Harry a comprar sus cosas- Hagrid puso una mano en el hombro de Harry el cual se vio obligado a Doblar un poco las rodillas, Reagan siseo furiosa.