18/12/2022.

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Hola, cómo están?

Gracias nuevamente por sus mensajes tan lindos y por preocuparse por mi bienestar.

Por suerte ya estoy mejor. La verdad es que lo qué pasó el sábado pasado me afectó muchísimo y me saco las ganas de todo. (Tanto que estuve a nada de borrar todo) Pero por suerte ese arranque de bronca se me fue al toque ajaja.

También quiero agradecerles por los 100k. Ni yo entiendo como les puede gustar tanto esto. Pero gracias, gracias.

Espero que les guste este cap... es lo qué hay.

Nos vemos amores. 💗🧚🏻‍♀️✨




































Julián no lograba calmar a Mateo de ninguna manera.

El hecho comenzaba a desesperarlo y sabía a la perfección que eso no estaba ayudando ni un poco.

Sumándole que estaban en medio de una tanda de penales donde se definiría quienes serían los campeones del mundo.

El sollozo silencio que soltó su cachorro lo hizo apretar los labios con dolor. Ya se le habían acabado las ideas para calmar aquel malestar, su hijo estuvo inquieto desde que se habían levantado aquella mañana. Julián sabía que podía sentir su ansiedad y miedo a través de su lazo.

Sumándole que Enzo tampoco estaba de la mejor manera.

Trato de distraerlo en el transcurso del día hasta que llegó la hora de ir al estadio. Ahí todo empeoró. Los aromas fuertes de las personas a su alrededor era abrumante hasta para él, ni siquiera podía imaginar la inquietud de su bebé.

Paulo estaba a su lado. Intento ayudarlo los primeros minutos pero luego se perdió en el partido y él lo entendió completamente. Lo estaba mirando muy por arriba ya que Mateo tenía toda su atención, sentía su omega inquieto y desesperado por calmar a su cachorro y él en serio que lo intentaba.

"Ju." Paulo lo llamó sin mirarlo. Su vista viajó al cuerpo tembloroso de su amigo que se encontraba parado a su lado.

Probablemente Julián era el único sentado en aquel inmenso estadio.

"El próximo es cachete..." No necesito que le explicará más. Lo entendió.

Volvió su vista a la cancha. Estaban del otro lado por lo cual venían de espalda a sus jugadores. El partido había sido insufrible, cuando creía que lo tenían controlado el equipo contrario lograba sacar mucha ventaja. era un ida y vuelta que tenía a millones de personas con el corazón en la garganta.

Sin dudas iba a ser un partido que iba a recordar toda su vida. La emoción y ansiedad no lo dejaron dormir la noche anterior. Fue tanto que eso de la una de la mañana llamó al alfa, cuando Mateo ya se encontraba profundamente dormido.

Hablaron bastante, mucho más de lo que hicieron alguna vez. Enzo se abrió con él y le confesó lo asustado que estaba por el peso que cargaba en sus hombros, un país entero. Una ilusión que era compartida por millones de personas.

Crimen. / AU Julian X EnzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora