Crimen. / AU Julian X Enzo

Primer año.

Holaassss amores!!❤️‍🩹

ADV: cap mas feo q yo

"Buen día, Matu..." Susurró. Su voz saliendo un poco ronca por levantarse unos minutos atrás. La luz de otro día gris en Londres entraba por el ventanal de su habitación. Su bebé se removió entre la sábanas, queriendo ignorar el llamado de su madre quien posó su mano en la pancita de su cachorro. "Hay que levantarse, amor... los tíos te esperan para desayunar."

Acaricio con suavidad su cabecita. Le costaba bastante levantarse a Mateo, siempre prefería hundirse en la almohada de su papá buscando el calor que comenzaba a irse con el pasar de las horas, pero aquel aroma fuerte, protector seguía intacto. Mateo abrió los ojos y casi con brusquedad llevó una de sus manitos a sus ojos, robándole una sonrisa al omega cuando sus miradas se encontraron por primera vez en aquel día.

"Feliz cumpleaños, bebé."

Julián se inclinó para besar su moflete rojo por culpa de estar pegado a la almohada. Dejando ir sus feromonas acarameladas para cubrir a su pequeño quien soltó un suspiro, complacido por aquel aroma deleitoso, suave que se mezclaba a la perfección con el de su papá. "Te amo muchísimo, Mateo..." Susurró. Levantando la vista para que sus ojos se encontraran con los cristalinos de su hijo. Mateo se removió, estirando sus manitos para atrapar el rostro de su mamá que estaba aguantando las ganas de llorar.

Su hijo estaba cumpliendo su primer añito.

El trece de febrero llegó en un abrir de cerrar de ojos. Julián recordaría ese día hasta el final de los suyos. Las miles de emociones que habían atravesado su cuerpo y ser. El miedo dando comienzo pero la felicidad dándole un final eterno. Mateo llegó a él como el rayo de sol más cálido luego de una tormenta que creía que no tenía conclusión.

Y ahí estaba ahora, cumpliendo un año de vida. Un año donde habían pasado más cosas de las que podía imaginar, donde podría decir que admiraba al pequeño ser que tenía a su lado. Mateo soporto más de lo que podría un bebé de su edad, una enfermedad que no lo dejó en paz, no tener a su papá y después si. Viajes que ninguno de los dos tenían previstos pero que soportó como nadie.

Julián sabía que parte de querer estar todo el día con él era por el cambio drástico que dieron de vida. Los primeros días en portugal fueron difíciles y ahora en Londres estaban siendo igual. Enzo estaba muy estresado por todo lo que conllevaba mudarse y el club, aunque trataba de dejar aquel estrés fuera de casa era difícil. Julián lo sabía por su lazo y Mateo también.

Dejo un pequeño y dulce beso en la nariz respingada del menor ganándose un frunce acompañado de una mueca que hizo sonreír al omega. "Vamos a levantarnos, cumpleañero... Si, matu." soltó una risa cuando lo vio removerse, queriendo darse la vuelta para seguir durmiendo. "Hay que desayunar y después bañarse así esperamos a papá ¿Si? vamos, amor..." Intento tomarlo en brazos ganándose un quejido chiquito. Julián besó su mejilla cuando lo alzó por completo, dejando que se esconda en su cuello.

Tenía que bajar por que ya había oído gente en la cocina haciéndole saber que sus invitados se habían levantado, seguramente eran sus padres. Habían llegado todos la noche anterior. Julián estaba muy emocionado de tener su familia y amigo ahí. los recibió a todos con un abrazo cálido, cenaron perdidos en una charla que no encontraba fin, como si aquel mes que no se veían hubiera sido casi un año.

Enzo participó bastante hasta que llegó la hora de irse a dormir. El omega vio sus ojos cansados por culpa del entrenamiento que tenía encima pero aún así su alfa sonría completamente ingenuo. Le había asegurado que podía ir a dormirse con Mateo con tranquilidad cuando se hizo las once de la noche, sabiendo que tenía que levantarse temprano. Al principio se negó pero terminó aceptando, él se quedó un rato más con los suyos hasta que también decidieron irse a dormir.