Epílogo.

4.3K 320 646
                                    

3/3






















Un Epílogo distinto como lo es todo Crimen.




































Cinco meses después...

















Cinco meses después

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
















































Actualidad.








Pasos rápidos y precisos, tratando de caminar entre toda esa gente que había en aquel pasillo estrecho, dejó soltar el soplido por su boca, cansado. Le dolía un poco la espalda y sumándole que su humor no estaba siendo el mejor en ese momento. Tuvo una mañana complicada, siempre lo era cuando sus hijos se levantaban con cierto humor.  Pero hoy era un día distinto, había extrañado el sol brillante, cálido de Argentina y su gente. No era para nada comparado a Reino unido y por más que haya pasado años viviendo allí jamás pudo acoplarse como correspondía .

Porque nada se comparaba a la magia y amor de su país.

Un sonido desde el fondo de su garganta se escapó, casi parecido a un gruñido al perder dos segundo de vista a su hijo. "¡Mateo! ¿podes esperarme?, por favor. Nadie te apura, hijo." El pequeño de siete años paró en seco al oírlo, entendiendo al instante aquel tono demandante de su mamá, aquel que su papá le tenía un poco de miedo. Se dio la vuelta para mirarlo, cruzando sus bracitos en su pecho. "Apurate, mami. Quiero llegar." su vocecita salió con cierto reproche.

Estaban en el monumental.

Era el último partido de la temporada y sin dudas no podían evitar llevar a su hijo a verlo. Mateo era un gran fanatico de River, su padre se había encargado de que lo sea y por eso ahora se encontraban en uno de los pasillos buscando el palco que les corresponde.. Había sido toda una odisea llevarlo hasta ahí en forma de sorpresa, primero porque su hijo no quería salir de la casa justo al horario que sabía que jugaba el equipo millonario, segundo porque tanto como a Enzo y Julian les costaba guardarse esos tipos de secretos que sabían que pondría felices a sus hijos. Y eso había ocurrido, cuando el cachorro noto donde estaban yendo se había largado a llorar de la emoción en pleno auto, agradeciendo a sus padres entre lágrimas que el omega no tardó en largar también.

No había forma de explicar el amor y satisfacción que le daba poder hacer feliz a sus hijos.

"No puedo apurarme, tengo a tu hermana a upa." Mateo miró a la pequeña que estaba en los brazos de su madre y con su rostro escondido en su fuente de aroma. Frunció el ceño al ver que era la culpable de su tardanza. "Y que camine." Rezongo, sacando su labio inferior hacia afuera. Julian no podía creer que estaba haciendo un berrinche delante de tantas personas.

Crimen. / AU Julian X EnzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora