Aroma a Canela y Menta. (Drarry Omegaverse)

Capítulo 11.

Caleb Ashcroft, estudiante de octavo curso en Hufflepuff, era un Alpha dominante, joven, alto y seguro de sí mismo. Destaca por su cabello anaranjado y liso, corto, que enmarca su rostro con pulcritud. Sus ojos verdes claros y su tez clara aportan una mezcla de curiosidad y bondad a su expresión. Su imponente estatura le otorgaba una presencia destacada, haciendo que incluso aquellos dos chicos temblasen ligeramente al tenerlo tan cerca.

-Parece que a algunos se les ha olvidado como tener modales y respeto hacia las personas que no desean ser molestadas.- Espetó Caleb, juzgando con la mirada a sus dos compañeros. -Creo que la señorita ha dejado claro que no quiere que estéis cerca, ¿verdad?- Acto seguido, retiró su mano del brazo de su compañero, liberándolo.

Ante la decidida intervención del chico, los dos jóvenes no tuvieron más opción que retirarse de la escena, dejando tras de sí un rastro de temor palpable en sus miradas, desvaneciéndose en la distancia del patio. Los tres Leones, atónitos por un momento, dirigieron sus miradas hacia el hombre que había intervenido con valentía. Hermione, con gratitud iluminando sus ojos, le dedicó una sonrisa esperanzadora. Aquel chico, notablemente cortés y desprovisto de cualquier vacilación al ayudar a quienes lo necesitan, provocó un destello de admiración en la expresión de la joven bruja. Él podría ser, sin ninguna duda, la persona que su amigo Harry podría necesitar para quitarse aquel pacto de encima. Podría sanar el corazón de su amigo y finalmente otorgarle la felicidad que tanto merecía. Mientras el chico se disponía a retirarse discretamente, Hermione lo detuvo con sus palabras.

-Muchas gracias por la ayuda, de verdad.- Expresó Hermione con sinceridad. -¿Cómo te llamas?- Esta simple pregunta hizo que tanto Harry como Ron arquearan una ceja, compartiendo una expresión de extrañeza ante la inusual curiosidad de su amiga.

-Oh, ¡claro!- Comentó el muchacho dándose la vuelta de nuevo. -Acabo de llegar y, para vosotros, soy tan solo un desconocido. Mis disculpas por eso. -Se acercó un poco más hacia ellos. -Me llamo Caleb Ashcroft, un placer. Afortunadamente, ya sé vuestros nombres. -Sonrió dulcemente. -¿Hermione Granger, verdad?- Preguntó, y ella asintió con una sonrisa. Luego, dirigió su atención hacia los dos leones que aún permanecían sentados. -Ron Weasley y, por último, Harry Potter.- Dijo, estudiándolos brevemente. Después de unos segundos de silencio, volvió a centrar su mirada en la joven bruja. -Realmente es un placer tener frente a mí a las tres personas que salvaron el mundo mágico.- Añadió, reconociendo la magnitud de quienes tenía ante él.

No muy lejos de la escena, los tres Slytherins se detuvieron en seco al presenciar cómo ese chico intervenía en auxilio del trío de Leones.

-¿Quién diablos es ese?- Inquirió Pansy, escudriñando al joven Alpha con una mirada penetrante.

Un silencio pesado se posó sobre Blaise. La imposibilidad de acercarse a su pareja lo sumía en un sentimiento de miseria. Necesitaba que se percatara de su presencia, pero este estaba tan absorto en la figura del chico en cuestión que parecía ajeno a todo lo demás.