Capitulo 56

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Escuchamos el pitido del claxon y Santiago se separa de mi

Vuelve a conducir y yo confundida volteo hacia adelante

Mi celular vuelve a sonar y decido sacarlo

Es mi hermano

Suspiro y le cuelgo

— Que arda el mundo un rato — digo riendo

— Si de por si... ya me tienen ganas de golpearme con esto empeorare todo — dice Santiago

Me río

El estará encerrado y no creo que lo sepa...

Y yo, creo que lo mejor será irme con Cesar y alejarme

Veo la avenida donde están los dos carriles

Uno para la zona de departamentos y uno para mi casa...

Cuando Santiago va a dar para el carril de mi casa estiro mi brazo y volteo el volante lentamente dándole a entender que se vaya por el otro lado

Santiago entiende y voltea el volante

— No paso nada con ella... solo nos metimos esa porquería y me acosté a dormir, cuando me di cuenta lo que hice fue demasiado tarde — dice Santiago a mi lado

— Esta bien... no entiendo, pero sé que debe ser difícil sentir esas necesidad de más... — digo mirando al frente

— Un ejemplo... es la necesidad de una persona — dice Santiago y yo volteo a verlo

Veo su mandíbula marcarse e inmediatamente siento calambres en mi vientre bajo

— Esa necesidad de mas cuando estas teniendo sexo... es algo parecido, pero uno es bueno y el otro es malo — dice sonriendo de lado

Volteo a ver sus manos en las cuales sus venas marcadas se hacen presentes cuando aprieta el volante

Joder...

Volteo mi vista y me pongo a ver Instagram en mi celular

Veo que me siguen llegando mensajes

Como si me fuera a pasar algo estando con el... o como si me fuera a matar

Me entra una llamada de Alaric

Le respondo y pongo alta voz

— ¿Qué? — respondo

— Los estoy siguiendo — dice como si nada

Veo por el retrovisor y veo un auto negro

— ¿Por qué? — le pregunto confundida

— Joseph mando una caja con una paloma dentro, la paloma estaba muerta y con el vientre abierto — dice Alaric

De solo imaginármelo me dan ganas de vomitar

Una paloma...

— ¿Qué decía la nota? — digo seria

Volteo a mirar a Santiago y el esta con el ceño fruncido

— Que eso te va a pasar cuando te atrape, porque si no eres de él no serás de nadie — dice Alaric

Siento escalofríos recorrer mi cuerpo

Acaricio mi panza

— No voy a dejar que les haga algo ese maldito — dice Santiago

Cuelgo y me siento con nauseas

Veo que entra al estacionamiento de un hotel

Apaga el auto y yo abro la puerta

Empiezo a vomitar agua porque no he comido en todo el día...

POR TI (2/2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora