FINGIENDO SER NOVIOS
ADELINE
Jaxon toca la puerta para que segundos más tarde esta sea abierta para mostrarmos a Jon.
-¡Feliz cumpleaños!-exclamo dándole un abrazo que él corresponde entre sorprendido y encantado.
-Gracias, Adeline-dice cuando nos separamos-Es un gusto volver a verte.
Pongo una mueca incómoda al recordar nuestro primer encuentro.
-Preferiría olvidar ese momento-le extiendo un paquete que él rompe.
-Veo que te informaron bien-dice con una sonrisa a la vez que mira la botella de vino-Gracias.
-Feliz cumpleaños papá-le dice Jaxon antes de abrazarlo.
-¿Qué me trajiste?-le pregunta cuando se separan haciéndome reír.
-Nada.
-Entonces no entrarás.
Jaxon saca de su bolsillo una caja que le extiende y cuando la abre vemos un reloj.
-Gracias, es increíble.
En el momento en el que accedemos a la casa veo a todos los invitados sentados alrededor de la mesa en un absoluto silencio.
-Ella es Adeline, la novia de Jaxon.
Todos asienten antes de mirar a cualquier lado.
Qué ambiente.
Me siento junto a Jaxon al tiempo que los empleados ingresan para colocar un plato frente a nosotros y cuando se van todos comienzan a comer sin decir palabra hasta que una anciana le habla a una chica de mi edad que está ubicada a unas sillas de mí.
-¿No crees que has venido muy provocativa Janys?
Le echo un vistazo al anciano de mi lado, quien se encarga de mandarle mensajes subidos de tono a una tal Saril.
-No-dice bajito la chica.
-Da asco cómo estás vestida, pareces una puta.
¿Qué le pasa a esta mujer?
Veo cómo todos los demás se muestran incómodos pero siguen sin decir nada.
-Así nunca conseguirás un marido-mira al hombre junto a mí-¿O no, amor?
El anciano quita la mirada del celular para asentir.
-Disculpen que me meta-comienzo a decir con una sonrisa--Pero ¿quién se cree usted para opinar sobre la vestimenta de los demás? ¿Por qué no se fija en lo que usa usted?
Mis palabras la llevan de la sorpresa a la molestia; se nota que está acostumbrada a hablar sobre los demás sin que nadie le diga nada.
-Además, es preferible no tener marido si nos va a tocar uno como el suyo que la engaña.
A la anciana parece que le va a dar algo mientras toma sus cosas antes de salir de la casa. En consecuencia, su marido va tras ella.
Camino hacia un parlante para colocar una canción a todo volumen.
-Bueno, arriba-le ordeno a todos-Esto es un cumpleaños, no se ha muerto nadie.
Jaxon me mira con una sonrisa súper dulce mientras que los demás se levantan con inseguridad. Debido a esto, me encargo de formar parejas consiguiendo que de a poco se suelten.
-Mi padre luce feliz-me dice él antes de que vaya hacia mi mochila para sacar unas botellas de alcohol-¿Por qué trajiste eso?
-Siempre es necesario en una fiesta-le digo para después darle una botella a cada invitado.
-¿Quieres bailar conmigo?-me pregunta Jaxon logrando que acepte para que nos adentremos en un baile que dura minutos en los que me canso demasiado, cosa que me extraña porque no me suele suceder, hasta que este se detiene cuando su rostro termina a centímetros del mío.
-Son tan lindos-dice alguien.
-¿Por qué no se besan?-pregunta otra persona.
No quiero hacerlo, pero acordamos algo. Así que ambos unimos nuestros labios consiguiendo que mi mente se llene de recuerdos a la vez que sus manos van a mi rostro con delicadeza, recordándome que para él este momento es completamente diferente.
Después de eso, el tiempo sigue pasando trayendo el momento de nuestra despedida.
-Gracias por alegrar este día-me dice Jon con una sonrisa-Y gracias por decir lo que todos queríamos decir.
Al salir, el ambiente se vuelve tenso.
-Volvemos a ser lo que en realidad somos-comenta Jaxon con un poco de tristeza.
-Sí.
-¿Te hace muy feliz?
-Sí-respondo con sorpresa.
-¿Más de lo que yo te hacía?
-Jaxon...
-Por favor, responde.
Suelto un suspiro.
-Él me hace más feliz.
Odiaba hacerle daño, pero no iba a mentirle.
-Me duele, pero quiero que estés con quien te hace sentir mejor, aunque esa persona no sea yo.
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En el ojo de la tormenta
Romance《Seré delgada, no me importa lo que tenga que hacer para conseguirlo.》 Después de esas palabras, Adeline Belmore se adentrará en un camino lleno de peleas, llantos, hambre y culpa. Pero su vida no solo será envuelta por el dolor, ya que su hermanast...