You belong to me - Cat Pierse
Helena
No quería despertar nunca de aquel sueño tan hermoso.
Dónde Alexei se arrodillaba ante mí, dándome un hermoso y sencillo anillo de compromiso, proponiéndome matrimonio.
Mientras él deslizaba el anillo en el dedo anular, aceptaba emocionada y con las lágrimas empañando mi rostro.
Para después crear la familia que siempre desee tener.
En el sueño, me veía a mí misma sostener un bebé en brazos.
Un bebé con los cabellos oscuros tan oscuros como los míos y ojos azul grisáceos como los de Alexei.
Nuestro hijo.
Un hijo que nunca crearíamos juntos.
Siento el rostro húmedo y abro lentamente los ojos, acostumbrándome a la luz del día que se filtra a través de las cortinas.
Espero encontrar el cuerpo de Alexei detrás del mío para un poco de consuelo después de aquel hermoso y a la vez triste sueño.
No siento el calor emanar de su cuerpo y trasmitirlo al mío.
Giro el rostro, para comprobar que está un profundamente dormido Alexei, me decepciono al instante al ver el otro lado del colchón
El otro lado de la cama donde se supone debería estar Alexei, se encuentra frio y vacío.
Me incorporo de prisa en la cama cubriéndome el pecho con las sábanas.
- ¿Alexei? – Lo llamo a Alexei, pensando que pudiera estar en el baño.
Pasan los segundos y no sale del baño cuando lo he llamado, no escucho ningún sonido que provenga del cuarto del baño y me indique que está allá adentro.
Mi mirada se fija en la puerta cerrada de la habitación.
Pensativa.
¿A dónde se ha ido?
¿Cómo podía estar completamente segura que Alexei realmente estuvo en el apartamento anoche?
¿Acaso todo lo había soñado y él nunca intentó entrar y forzar la puerta de la entrada?
¿Me estaré volviendo loca?
Su visita de ayer, me había afectado tanto que ahora creía que él había decidido volver y susurrándome al oído que me casara con él porque no quería perderme.
Sentía un sentimiento de profunda tristeza y abandono.
Desesperada, busco un indicio que me diga que Alexei realmente estuvo aquí y dormimos juntos.
Pero no encuentro nada.
Anhelaba con toda el alma que todo lo que imaginé, hubiese sido real.
Tan pronto como despierto por completo.
Mi corazón se contrae contra mi pecho, algo tan parecido a un corazón rompiéndose en mil pedazos y unas inmensas ganas de llorar se apoderan de mí.
Ahora el llanto es causa del enojo y decepción.
Me enjuago el rostro con el dorso de la mano.
Me prometí que no volvería a derramar una lagrima por Alexei.
Menos si era una ilusión creada por mi mente.
Él se marchó el día anterior y parece ser que jamás volvió.

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Amor Mortal
Roman d'amourHelena, modelo reconocida de la marca de ropa más famosa de Italia, Raffaelli. Lleva una vida ocupada. Lo único que le importa es su trabajo. Los hombres la desean y abundan en su vida como las abejas en la miel atraídos por su belleza exótica. Su...