Amor Mortal

Capítulo 30

"Este amor es bueno, este amor es malo. Este amor regresó de la muerte. Este amor dejó una marca permanente. Este amor está brillando en la oscuridad. Estás manos tuvieron que dejarlo ir libremente y este amor regresó a mí" - Taylor Swift

This love (Taylor's Version) - Taylor Swift

Helena

El apartamento era precioso y demasiado espacioso.

Cuando decidí verlo por primera vez, esté estaba amueblado.

Con grandes ventanales del piso al techo y paredes blancas y pisos de madera.

Haciendo que la luz natural del día se filtrara por todo el apartamento.

Me había instalado en él hacia una semana.

Me estaba acostumbrando a vivir sola nuevamente.

No me quedaría por mucho tiempo el apartamento, mi estancia sería pasajera y bastante corta en Milán mientras terminaba la semana de la moda y terminaba los trámites para venderlo y poder comprar una casa en la Toscana.

Pronto volvería a Florencia cuando terminara la temporada y vivir en calma hasta que Raffaele volviera a llamar para comenzar con la nueva temporada para volver al trabajo.

Extrañaba las interminables ocurrencias de Isabella y las largas y dulces siestas que Alessandro tomaba entre mis brazos cuando me sentaba en el patio trasero en casa de Ivana.

Echaba de menos compartir mi tiempo con esos adorables niños.

Pero tenía que trabajar y volver a ser la mujer independiente que solía ser antes de conocer a Alexei.

Me encontraba terminando de arreglarme antes de dirigirme al trabajo, cuando el timbre resonó por todo el apartamento.

No tenía muchas visitas.

Mi círculo cercano en el trabajo conocía donde vivía.

Debía tratarse de alguno de los vecinos que necesitaba hablar conmigo sobre algún tema del mantenimiento del edificio.

Podría tratarse de Cristian, el nuevo modelo que acabada de integrarse como modelo y con el que tenía que compartir cámaras.

Tampoco descartaba que podría ser Carolina, la mujer de bienes raíces que venía para la firmar los documentos sobre venta del apartamento.

Había invitado a Ivana y Fabián al show, podrían ser ellos.

O en el peor de los casos, podría tratarse de Alexei.

Camino con impaciencia hasta la entrada.

Suspiro con el corazón en la garganta tomando la perilla de la puerta.

Habían pasado meses desde que estuve frente a frente de Alexei.

No quería encontrarme con el rostro de Alexei.

Porque no dudaría en darle un portazo en la cara.

El corazón golpea con fuerzas contra mi pecho, queriendo salirse de mi cuerpo.

Mi cuerpo aún reaccionaba de esa forma de solo pensar que al otro lado de la puerta podría estar Alexei.

Aunque los meses habían pasado, no podía olvidarme y superar tan fácilmente el amor que sentía por él.

Vuelven a llamar a la puerta.

Me tomo un par de segundos antes de abrir la puerta y colocar una postura frívola y desinteresada.