Chayanne estaba en su habitación cuando escuchó que su padre entraba a esta.
—Hijo, gracias por tener la confianza de decirnos y darnos aquello que encontraste, pero lo que hay en esa carta es algo que se tiene que afrontar, ¿la leíste?— la voz de su padre era delicada.
—No... pero no hizo falta.— no había volteado a ver al mayor.
—¿A que te refieres?— este se acerca y toma asiento en la cama en donde el menor estaba acostado.
—Que yo se todo lo que paso, se sobre la infidelidad que hubo entre el padre de Leo y el de JuanaFlippa, fue accidental.— seguia sin mantener contacto visual con su padre.
—¿Como te enteraste? ¿Nos escuchaste hablar ayer? Quiero la verdad, hijo— Missa quería saber de donde había sacado dicha información.
—Nada de eso, yo los vi como se encontraban e iban a la casa de Mariana, fui el primero en darse cuenta de eso pero solo que no quise hablar.— aquellas palabras hicieron que el peli-negro se sorprendiera un poco.
—Cuéntame más...— estaba intrigado.
—Fue una noche, cuando los tres estábamos explorando y yo me separé porque había visto algo que me llamó la atención, fue ahí cuando escuché unas voces y me escondí para ver quiénes era, hasta que los vi a ambos en un lugar que nadie de la Isla conocía... Estaban muy cariñosos y después vi como tomaron un rumbo, los seguí hasta ver a donde iban y note como llegaron a la casa de Mariana, después fue cuando volví con ustedes.— hablo sin más. — Cuando vino Leo para hacer pijamada y empezó a hablar de eso no pude evitar sentirme mal, no quería que ella supiera porque me haría sentir culpable de a ver visto aquello y guardar el secreto, además, me caen bien sus padres como para que cayeran tan bajo y tuvieran mala reputación, por eso mismo me quedé callado pero después encontré la carta y las flores que lo confirmaban aun más...— su voz se estaba rompiendo.
—Todo este tiempo has estado guardando aquel secreto... Hijo, te dejo, Philza y yo vamos a salir...— su voz era distinta, estaba algo rota y sin aliento.
Missa salió de la habitación sin decir ni una sola palabra más, no podía creer que su hijo había estado guardando aquel secreto durante meses y no haberlo platicado con nadie. Ambos prometieron no contar nada pero como había dicho el mismo, tenían que afrontar las consecuencias.
Mientras iban en camino a la torre de Vegetta no podía sacar aquellas palabras de su mente, estaba tan metido en sus pensamientos que no se dio cuenta que ya habían llegado a su destino. Philza tocó la puerta y a los segundo les abrieron.
—Leo? Aren't your parents here?//¿Leo? ¿No estan tus padres?— la menor mira con confusión.
—Que si no están tus padres— traduce el peli-negro.
—No, ambos salieron y no se a donde fueron, pero me dijeron que no tardaban, ¿que pasa? Es un gusto tenerlos por aquí— responde tranquila.
—Oh, es que— saca el sobre. —Esto es algo para tu papá Foolish— se lo entrega a la menor. —Se lo entregas cuando llege, es privado así que no lo abras, ¿está bien linda?— la voz del chico mostraba un poco de preocupación.
—Esta bien, ¿se les ofrece algo más?— dice amable.
—No, solo era eso, nos vemos luego, Leo— se despide para de pues irse junto a su pareja.
La menor entra a la casa y examina un poco más aquel sobre, ve como esta decorado y un poco sucia. Se va a su habitación y nota que esta ya estaba abierta, se prometió el pelear contra su curiosidad por no abrirla pero simplemente no podía.
—¡Me prometí no abrirla pero mi curiosidad es mucha!— habla con ella misma. —Bueno, ver un poco no es malo, después de todo mi papá Foolish no me oculta nada, debe ser otra cosa, la curiosidad mato al gato pero da igual— la menor no resiste y toma la nota que estaba dentro de esta. —Prometo contarle a mi papá que lo leí, espero que no sea problema— estaba tan entusiasmada por saber lo que venía dentro de aquella carta que no tardó en tomar la lectura.
Foolish estaba cansado de haber estado toda la tarde fuera tratando de conseguir los últimos materiales que le hacían falta para terminar su construcción, se tuvo que regresar debido a que la oscuridad estaba llenando el lugar y las criaturas no tardarían en aparecer dificultando más su llegada. Entra a la torre del mago y ve que todo está silencioso y un poco oscuro, este alza la voz hablando a la menor pero no obtiene respuesta y supuso que la menor ya estaba dormida.
Sube al siguiente piso y se dirige al cuarto de la pequeña, al entrar estaba en lo cierto, esta ya estaba dormida. Sin querer interrumpir su sueño de va de la habitación dejándola sola.Leo estaba recostada, lágrimas resbalaban por sus mejillas mientras que mojaban parte de su sábana, el contenido de aquella carta había sido demasiada explícita para ella y al terminarla la guardo debajo de su almohada, a pesar de estar destrozada su rostro no tenía expresión, estaba totalmente seria mientras que lágrimas seguían brotando de sus hinchados ojos después de estar algunas horas llorando.
Por alguna parte sentía un inmenso odio hacia su padre y dicho amante, no podía creer que este tuvo el descaro de haberle mentido a ella y a su hermano al igual que a su otro papá. Odiaba a Mariana por el hecho de que enamoró a su padre lo suficiente a tal punto que le era imposible borrarlo de su mente, odiaba a ambos. A pesar de eso, una parte de ella perdonaba a su padre después de aquello, no quería sentir eso pero en ese momento estaba segada que no quería aceptarlo.Quería que Foolish afrontará en el problema en el que se había metido y la única forma de hacerlo era entregarle la carta a su padre Vegetta para que ambos hablaran y arreglaran aquella situación. No quería hacerlo pero no tenía de otra, sabía que su familia estaba por un mal rumbo y que no podía hacer nada para mejorarlo, sabía que después de hacer aquello las peleas se harían más frecuentes pero no le importaba, su familia estaba tan destruida que ya no le tomaba importancia a aquellas peleas y tan solo actuaba normal para no perder el único brillo que queda en su familia, si es que estos lo consideraban.
Pensó seriamente en entregarle una copia de la carta al castaño pero no le tomó mucho decidir y también el tendría que afrontar el problema en el que ambos se habían metido, quería que la pareja del mexicano se enterara si es que no lo había hecho para así estar más tranquila a su parecer. Le daba igual lo que pensaran de ella pero su paciencia se había acabado y estaba decidida en hacer aquello, al fin y al cabo la verdad tendría que salir a la luz tarde o temprano, y ese era el momento. Su familia ha había llegado a su fin por más que trato de mejorar las cosas.
P. 1212
Fok
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Volverte a tener
FanfictionFoolish, uno de los mejores constructores de la Isla, se ve envuelto en una situaciones un tanto prometedora con su ex-pareja. A medida que pasa el tiempo, la situacion se vuelve más grave llegando a tal punto que esto llega a oidos de todos los hab...