VIII

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- Te~te lo prometo ahhm! — prometió el Omega quién ni siquiera había pensado lo que le dijo Muzan.

El Omega gemía de placer pues cada rose que Muzan hacía en su interior lo excitaba, haciendo que se sintiera de lo mejor.

Muzan comenzaba a besar el pecho del Omega dejando besos en cada parte, movía sus dedos en el interior de Tanjiro con fuerza y rapidez pues le encantaba escuchar cada gemido que el Omega producía.

- Ahh!

El Omega se corrió manchando la parte superior del alfa con su semen. Muzan saco sus dedos, sintiendo que su miembro estaba a punto de estallar. Sentía su pene totalmente erecto necesitaba más que meter los dedos en Tanjiro pero debía resistir.

- te sientes mejor!? —preguntó el alfa quien veía a Tanjiro totalmente satisfecho, recostado en la cama.

- s~si —respondió el Omega que a penas podía respirar bien, intentando regular su respiración.

Muzan se levantó de la cama para dirigirse al armario que claramente se podía ver que alguien lo movió de lugar. No le dio tanta importancia, sacando ropa limpia.

Por otro lado Tanjiro intentaba regular su respiración al cien por ciento, hasta lograrlo, luego se sentó en la cama viendo lo mojado que estaban las sabanas, sucias e incluso por su semen. Luego dirigió su mirada al frente encontrándose con el alfa quien tenía la parte superior descubierta.

Tanjiro miraba detalladamente el cuerpo de Muzan pues estaba muy bien trabajado, aunque le llamaba la atención algo. Tenía muchas cicatrices en el cuerpo y eso le hizo pensar el porque. Ya que era muy curioso teniendo demasiada curiosidad por preguntar, porque la cicatrices aunque si lo hacia podría enfadar en algo al alfa o eso pensó. Así que lo mejor era quedarse callado y con la tremenda duda.

- Mu~Muzan! —habló el Omega algo nervioso y asustado.

- dime!? —preguntó el alfa, vistiéndose.

- podría pe~pedirte algo!? — el Omega bajo la cabeza con miedo y pena aunque sabía que la respuesta de Muzan sería un simple ¡no!

- dime!? Pero solo te diré algo, que si pides querer salir de aquí no te lo cumpliré —respondió con la voz firme y gruesa.

- no era eso, enserio, pero quería pedirte que no me vuelvas a encadenar, cuando estoy encadenado me siento muy mal y no me gusta! —pidió el Omega viendo como Muzan terminaba de vestirse.

- está bien! No lo hare si te portas bien, otra cosa?

A Tanjiro le sorprendió que haya aceptado lo que le dijo, aunque le sorprendió aún más escuchar que dijera que podía pedir otra cosa.

No vuelvas a dejarme solo otra vez. [ 𝙈𝙪𝙯𝙖𝙣𝙟𝙞𝙧𝙤]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora