ᨏᨐᨓ 𝒅𝒆𝒔𝒄𝒓𝒊𝒑𝒄𝒊𝒐́𝒏 ᨓᨐᨏ
Tanjiro Kamado es un Omega demasiado joven y hermoso, pero una simple acción, provocará que conozca a Muzan, el Rey de los demonios, algo que cambiará su vida para siempre. ¿Pero, podrá ser feliz?
Comenzando así un l...
Y Tanjiro jamás sabrá que estará al lado de un verdadero monstruo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Un día especial, nuevo y único empezaba para Tanjiro, una nueva vida, al lado de su Alfa. La música suave de fondo pasaba por sus oídos, sentando en una silla en donde podía ver todo lo que pasaba afuera, sin que nadie lo viera a él, mientras Inosuke y Zenitzu terminaban de dar los últimos toques para que todo estuviera a la perfección.
Tanjiro podía escuchar los latidos de su corazón, que no dejaba de palpitar a mil, sus temblorosas y sudadas manos, estaba completamente asustado y nervioso. Aún no podía asimilar que ese día había llegado, un día que jamás creyó que llegaría, llego.
Miraba a todos desde adentro, muchas personas importantes, amigos de Muzan habían llegado, personas que ni siquiera conocía, pero Muzan sí. Pero también veía a sus amigos, que disfrutaban de todo. Le alegraba que al menos, todos lo estén disfrutando.
-¡Bien! Eso es todo, quedaste hermoso amigo. —hablo Zenitzu, llevando a Tanjiro a un espejo.
Tanjiro vio lo muy bien que había quedado, el traje azul, los zapatos negros, su cabello bien peinado, todo estaba perfecto. Y agradecía a Zenitzu y Inosuke por estar ahí con él, más cuando es un día especial.
-Muy bien Copanchiro, sin miedo. —dijo Inosuke, que traía en sus manos un pañuelo. -ten, veo que lo necesitas.
-Gracias. —agradeció.
-Vamos Tanjiro, este será un día que jamás olvidarás, por fin, después de todo lo malo que pasó y viviste, llegó el momento en el que puedas ser feliz, junto a tu familia y amigos.
-Losé Zenitzu, pero tengo miedo.
-¿Por qué? —preguntó Inosuke. -porque tendrías miedo, todo saldrá bien, debes de disfrutar tu boda.
-Podría decir que me siento triste y con un presentimiento negativo en mi corazón, pero a de ser porque me siento nervioso. Además, Muzan dijo que nos mudaremos a Alemania después de la boda. Y no quiero dejarlos y tener que empezar una nueva vida. —respondió decaído.
Ambos Omegas solo sonrieron por lo que dijo su amigo, se acercaron hasta Tanjiro, para darle un fuerte y cálido abrazo.
-No te preocupes por nosotros. Debes de ser feliz. —dijeron.
-Los quiero. —abrazando a sus amigos, por última vez.
Todos en el lugar hablaban sobre la boda, muchos felicitaban a Muzan y otros traían un sin fin de regalos.
-¡Felicidades por tú boda! —felicito uno de los amigos de Muzan.
-Gracias.
-En verdad espero que tú y tú pareja sean muy felices. —felicito una chica, que traía detrás de ella un regalo, que era sostenido por dos personas. -es un juego de tazas, hechas por el mejor artesano de Italia.