No vuelvas a dejarme solo otra vez. [ 𝙈𝙪𝙯𝙖𝙣𝙟𝙞𝙧𝙤]

XIX

- entonces Tanjiro esta bien? — pregunto el lider de los pilares.

- si! — respondió Tomioka - pero a estado más sensible de lo común! — expresó al recordar, como Tanjiro se disgustaba de su aroma.

- concuerdo con eso! — habló Shinobu - Tanjiro se a comportado, de una forma muy extraña.

- sufrió demasiado, debemos de darle su espacio, y no entrometerse. — respondió Gyomei.

- no quiero ser entrometido, pero debemos saber que le pasa! — comentó Sanemi.

- es extraño el comportamiento de Tanjiro! No creen? — habló Rengoku, esperando una respuesta de alguien.

- oigan! — llamó la atención Tokito. - no creen que este embarazado? O esa es mi opinión.

- puedes tener razón! — expresó Obanai.

- no debemos de decir tales cosas sin tener las pruebas suficientes — respondió el líder.

- perdón por interrumpir patrón — dijo Mitsuri. - pero Uzui todavia no ha venido. — hablo algo preocupada.

- Tengen, ¡claro! No me había percatado que no estaba. — hablo el líder, observando todo el lugar.

- lo que faltaba, ahora Uzui ni siquiera viene. — hablo enojado Sanemi.

- tienes razón — respondió Obanai. - el sabe más sobre lo que paso, y el debería de estar presente ahora mismo.

- talvez aún sigue triste por el engaño de sus esposas — Tokito hablo, pues estaba buscando a Uzui, cuando lo encontró con sus esposas las cuáles se perdonaban por su engaño.

Todos los demás se habían quedado sorprendidos por lo que había dicho, en verdad eso había pasado? O esa era la pregunta que todos se hacían así mismos. Nadie podía creer lo que había dicho Tokito, ya que nunca se esperaron que aquellas chicas engañaran a su esposo.

- en verdad eso escuchaste? — pregunto Rengoku.

- si! Además yo nunca miento — se defendió Tokito.

Todos aún seguían procesando lo que había dicho su compañero, era impresionante, aunque a la vez sintieron empatía hacia Uzui, eso era algo que a cualquier le dolería, ya que un engaño de la persona que amas, es lo más doloroso que puede pasar.

Al estar pensando se formo un silencio incómodo, pero ese silencio se acabo cuándo alguien hablo. Pero ese alguien fue na más y menos que.

- Que lindos se ven todos arrodillados — hablo Muzan, cortando aquel silencio.

Todos observaron a Muzan muy sorprendidos, en verdad era el mismo Rey de los demonios, el que estaba parado frente a ellos? ¿Porque?

- que haces aquí?! —preguntó alterado el patrón.