𝑴𝒂𝒅𝒅𝒐𝒙
—Di que sí.
Aparté los ojos de mi casillero para ver a mi mejor amiga, tenía una sonrisa enorme en su rostro igual a la del gato de Alicia en el país de las Maravillas. Tuve miedo porque esa expresión solo podía significar que una idea se estaba cocinando en su mente y de seguro no era buena.
Negué y se limitó a bufar mientras me seguía de camino a la próxima clase, por supuesto que ni siquiera compartimos asignatura pero cuando salía más tarde los viernes solía quedarse a hacerme compañía.
—No es una mala idea —dijo con un tono sugerente.
—No pregunté.
—Solo digo que, es una idea grandiosa. Es decir ¡genial! ¡increíble! —me dio un leve empujón— ¿No tienes ni un poco de curiosidad?
—En absoluto.
La mirada de mi mejor amiga me dejó en claro que la estaba cansando.
Sin darme tiempo a reaccionar se posicionó frente a mí de tal forma que detuve mis pasos, la miré con ambas cejas alzadas.
—¿Qué planes tienes en la noche?
Era viernes así que no lo dudé.
—Dormir —su puño impactó en mi hombro y me quejé— ¿Y eso por qué fue?
—¡No puedes dormir!
—¿Por qué?
—¡Porque es viernes!
Alcé una ceja e intenté seguir caminando pero me lo impidió.
—Penny, por favor...
—Solo escucha mi gran idea —la miré intentando contener mi sonrisa—. ¡Pijamada!
Lo dijo como si hubiera encontrado la cura a una enfermedad o bien se haya ganado la lotería, es decir, como si fuera realmente un suceso extraordinario. Puse los ojos en blanco y la esquivé para seguir caminando, no tardó mucho en seguir mi ritmo y se posicionó a mi lado.
—Anda, solo es una pijamada...
—Jamás es solo una pijamada.
Me regaló una sonrisa de angelito.
—Bueno, quizás había pensado en ir a un club...
—No, ni lo sueñes —la interrumpí de inmediato, eso no era para nada un plan habitual.
—Vamos, solo será un rato, nos divertiremos...
—Tú luego te irás con James y yo me quedaré sola, ni lo sueñes Penny.
Bufó mientras ambas entrábamos al salón, había pocas personas y el profesor aún no llegaba. Así que aprovechó esos minutos para seguir insistiendo y molestando, pese a mis negativas no parecía querer dar el brazo a torcer y aunque le ofrecí hacer pijamadas que incluyen palomitas y películas románticas se negó rotundamente.
Estaba decidida a llevarme a ese club y no había peor idea que esa.
Y ni siquiera se trataba de que las fiestas o esos lugares me disgustaran, bueno quizás estaba tan acostumbrada a llevar otra vida más tranquila que esas cosas no me llamaban la atención ciertamente. Pero aún así, aunque quisiera salir con ella no tenía posibilidades de hacerlo como una persona normal, primero debía asegurarme que Levi me diera su permiso, y eso también dependía de si podía enviar a alguien a vigilarme. Estaba muy segura, por la última conversación que compartí con Matthews que seguía molesto y no deseaba ser mi niñera esta noche.
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Traición y Sangre ✔ [+18]
Romantizm𝑷𝒖𝒆𝒅𝒆𝒔 𝒏𝒆𝒈𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒂𝒍 𝒅𝒆𝒃𝒆𝒓, 𝒐 𝒅𝒆𝒋𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒔𝒆𝒅𝒖𝒄𝒊𝒓 𝒑𝒐𝒓 𝒆𝒍. -------------------------------------------------------------------------------- En la mafia 𝘋𝘳𝘢𝘨𝘩𝘪 hay muchas reglas, pero para la hija del Don, todo s...