Una Familia para Navidad

Capítulo 20 Nueva rutina, nuevos espacios, nuevos amigos.

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El sonido de la alarma de María José hizo inevitable lo que Daniela venia postergando desde media hora atrás que había despertado pero que al sentir la calidez del cuerpo de la ojiverde entre sus brazos quiso extenderlo lo más posible. Valentina y Ramón habían reclamado como suya la mitad de la cama y ellas dos durmieron abrazadas en la otra mitad.

-Ya levántate, sé que estas despierta- menciona María José con voz ronca- tu tardas más en estar lista y yo tengo que despertar a Valentina.

-Cinco minutos más- aferra su agarre a la ojiverde- déjame guardar en mi memoria este momento porque no sé cuánto tiempo pase para volver a tenerte así conmigo.

-En verdad que no me acostumbraré nunca- sonríe recordando que ayer le había dicho dramática por este tipo de comentarios.

-No es necesario que te acostumbres, solo ámame y déjame abrazarte siempre- menciona con los ojos cerrados y los brazos alrededor de la cintura de María José quien sonreía al sentir que su Daniela había vuelto para quedarse.

Cinco minutos después, la alarma sonaba de nuevo y ahora un pequeño can y una niñita traviesa comenzaban a despertar haciendo que la pareja de mujeres se activara y levantaran para iniciar su día, uno muy especial y lleno de miedos e incertidumbre, pero también de fe.

-Vamos Vale, despierta mi amor- María José jugaba con la pequeña bajo las sabanas en la habitación de Daniela en casa de los Calle- recuerda que hoy es un día especial.

- ¿especial? ¿Pol qué? - cuestiona saliendo de debajo del edredón completamente despierta.

-Recuerda que hoy iremos al médico para que te den medicina y esos bichitos que andan en tu sangre se vayan para nunca más volver.

-No quelo- se regresa bajo el edredón- aquí me voy a quedal- menciona mientras María José busca jugar con ella por encima tratando de hacerle cosquillas.

-Vamos Vale, se nos va hacer tarde- menciona Poché quien comenzaba a impacientarse porque Ramón pensaba que jugaban y comenzó a saltar sobre ella llamando su atención.

- ¿Qué pasa aquí? - sale Daniela impecable en jeans y básica negra del cuarto de baño dejando a María José impactada por su belleza natural- ¿hay algún problema con este duendecillo? –levanta el edredón para ver a Vale riendo.

- ¡Mami Nany! –la pequeña se lanza hacia ella con emoción ya que no la había visto al despertar- pensé no estabas con nosotlas.

-Fue una promesa pinky, no la iba a deshacer- le deja un beso en la cabeza y la pequeña se abraza a ella con fuerza- ahora ¿no quieres ir al médico? –la pequeña niega con su cabecita metida en el pecho de la castaña- ¿por?

-Me da miedo- responde.

-Pero tu mami y yo estaremos contigo en todo momento, ¿no es suficiente?

- ¿podemos lleval a Tita con nosotlas? –cuestiona – Pol favol

- ¿Quién es Tita? -cuestiona Daniela.

-Ella- María José se acerca con la muñeca que Daniela le había traído del viaje.

-Oh, ya le pusiste nombre, me parece muy lindo- menciona la castaña- claro que Tita nos puede acompañar.

- ¿y Lamón? ¿él también puede venil? –pregunta a pesar de conocer la respuesta.

-Mi amor sabes muy bien que los perritos no pueden ir al hospital de humanos, ellos tienen su propio hospital de perritos- María José responde.

-Pero- Daniela interviene- podríamos ir en la camioneta con Williams y que él se quede cuidando y paseando a Ramón por el parque y cuando salgamos pueda ir con nosotras a donde sea que vayamos.