No Regrets ~Jkk-TN

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Mi cuerpo reacciono a su toque, tenía razón, pero mi loba estaba reacia a él , cundo oímos que se estaba tirando a la loba esa, en el lugar que supuestamente solo me había enseñado a mi, se le mezclaron sentimientos de tristeza y enojo.

-Jungkook, si no me sueltas, te juro que voy a gritar tan fuerte que toda la  manada me va a oír.

Me dio la vuelta para que lo mirara, sus ojos estaban completamente dorados, su pecho subía y bajaba, su olor estaba más fuerte de lo usual, su lobo, su celo, eran lo que estaban hablando.

-Vamos, Tn, sabemos que nos pertenecemos.

-Jungkook, no te puedo mirar en estos momentos, no tienes moral, estoy asqueada, por favor retírate.

Sus ojos bajaron la intensidad y observé como un rastro de decepción y rabia se hizo presente en ellos, sus manos soltaron su agarre y salió de la habitación azotando la puerta tras de sí.

-Gracias, lo único que quería el pulguso era bajar su calentura con nosotras.- Hablo mi loba.

-Lo sé- Le respondí.

Continúe haciendo mi labor, hasta terminar,  me cambie por mi pijama y baje a comer.

-Terminaste de empacar? - Pregunto mi madre.

-No es irónico?- Pregunté, al ver que no me respondieron, continúe.

-Me ofrecieron como si de un trozo de carne se tratara, me obligan a casarme con alguien  que es un desconocido para mí, y me corren de casa? Por la Luna,he tratado de hacer las cosas bien, de ser bue a hija, y me tratan como si fuera basura?-Les dije a mis padres, los cuales me miraron con sorpresa.

-Hija ya te explicamos, y si gustas, le damos el apartamento a Jungkook, pensamos que sería una oportunidad para que te independices.

-No, tomaré el apartamento, así estoy lejos de ustedes por un tiempo, se que no les importa, pero toda esta situación me duele mucho.

-Hija, no digas eso, claro que nos importas.- Respondió mi madre.

-Si fuera así, no habrían hecho nada de esto en un principio.

Estaba enojada, con todos, mis padres, Jungkook, los abuelos de Taehyung, el Alfa de la manada, incluso conmigo, mi loba estaba hecha bolita en un rincón, se sentía muy muy culpable de toda esta situación, la escuchaba lloriquear en voz baja, se que no es su culpa, no es nuestra culpa, nuestro destino fue decidido por personas egoístas, y una superstición que para mí es mera coincidencia.
No me moleste ni en mirarlos, simplemente me retiré a mi habitación, me acosté y no tardo mucho tiempo para que me quedarme dormida, soñé con el bosque, iluminado por la Luna, una luna roja, la brisa fría se sentía tan real que podría jurar que estaba ahí, sentía la humedad de la tierra en la piel, force mis ojos a abrirse, y ahí estaba, en medio del bosque, descalza, solo con mi pijama, desorientada me levante del suelo, miré a mi a  alrededor, definitivamente estaba en el bosque, pero era una zona que no conocía, levante mi vista y había un risco que se alzaba, esos eran más de 15 metros de altura, con una luna roja resaltando en el fondo, enfoque la vista un poco y observe, en la punta, al filo del risco había un lobo, un lobo negro, era el mismo de la cueva, me miraba intensamente, el silencio de la noche se rompió y dio paso a su aullido, un sonido majestuoso y intimidante al mismo tiempo, solo me quedé ahí, observándolo, mi loba, respondió su aullido, con la misma intensidad, con las mismas ganas, un escalofrío recorrió mi columna vertebral, el aire llenó mis pulmones y de repente sentí todo de forma maximizada, el viento se sentía más frío, la tierra debajo de mis pies, se sentía más húmeda, más arenosa, sentía cada diminuta piedra enterrarse delicadamente en mi piel, escuchaba mi respiración y los sonidos del bosque en detalle, el cantar de las cigarras era como una melodía que se transmitía por unos parlantes, el bulular de los búhos eran amplios y no discretos como siempre eran, mi corazón galopaba rápidamente, pero no me sentía en riesgo, escuché pisadas acercarse a mi, voltee a la izquierda y lo vi, el lobo, majestuoso y hermoso, era el lobo más lindo que he visto en toda mi vida, se acercó a mi, lamió mi pierna de forma cariñosa, me agache y le acaricié la cabeza, mi loba estaba eufórica, emocionada, se acercó a mi y lamió mi rostro, estaba emocionado, movía su cola de un lado a otro, la felicidad invadió mi ser y sentí que algo en mi interior, en el de mi loba y el mío hizo "click".

Compartimos y juguetemos, deje salir a mi loba la cual imploraba por salir, nunca la vi tan feliz y tan cariñosa con otro loba, ambas nos sentíamos bien, perdimos la noción del tiempo, que no percaté que el sol ya estaba iluminando el lugar, escuché una voz dentro de mi, que no era la de mi loba, era una voz varonil, gruesa y familiar por alguna razón:

-Esto era lo que quería, me encantó pasar tiempo contigo, pero el sol nos separa, pronto te volveré a ver mi amada y danzaremos juntos de nuevo.

Sentí un pequeño beso en mi frente y todo se volvió negro por unos minutos, al despertar, estaba en mi cama, miré a mi alrededor confundida, buscando tierra o algo que me diera una señal de que lo viví fue real, pero la tristeza y desilusión golpeó mi rostro, dándome cuenta que fue un simple sueño, por alguna razón quería que fuera real, quería quedarme ahí con ese lindo lobo.