___, piensa en algo.
Me dije a mi misma mordiendome el labio inferior mirando a todos lados, traté de moverme pero fue inútil al sentir unas cuerdas enredadas en mis piernas.
—Ah!! —solté un grito desesperado, agarre mi cabeza con mucha ira.—
La puerta abriéndose de esa habitación hizo que alzara la vista rápidamente.
—Si dejas de gritar todo estaría bien. —dijo Daniels que entraba y observaba el lugar.
—Tu no me dices que hacer. —musité mirándolo.
—Eres tan terca. —se arrodilló frente a mí.
Lo miraba, solo en silencio con mucha impotencia en mis ojos.
—Y tan estúpida. —terminó.
Sentía mi sangre arder dentro de mí al momento de mirarlo directamente a el, mi cuerpo lleno de fuerza que querer desatar.
Entonces el bajó su mirada a mis manos que estaban posadas en el suelo, retrocedió dejándose caer en el.
Sentía una gran vibración en ellas, una fuerza sobrenatural apoderandose, las levanté y ví unos destellos azules salir de estás, una vibración desbordar por mis puños.
—¿Que? —musité y miré al hombre aterrorizado que estaba frente a mi que me observaba con miedo.—
No tuve conciencia después de eso, lo único que pudieron ver mis ojos en una luz blanca demasiado fuerte, los cerré con fuerza al dolor inmenso de mi cabeza.
Sentí silencio y mis piernas liberadas, abrí los ojos y estaba enfrente de unas oficinas.
—¿Que mierda? —miraba a todos lados con mucha confusión.—
Volví a mirar frente a mi y al parecer era un edificio abandonado, decidí entrar.
Todo esto parecía un sueño, entré y era un lugar lleno de polvo con su color blanco en todas las paredes.
Unas escaleras en espiral estaban ahí, las subí y encontré más oficinas.
Entré a una y todo estaba destruido, lleno de polvo todo el lugar, una carpeta estaba en el suelo, la tomé y quité la suciedad que tenía encima.
"Comisión"
—¿Comisión? —fruncí el ceño y abrí esta, contenia papeles y en uno estaba mi nombre con un tipo de registro.—
"___ último viaje a 1980."
Me quedé analizando toda la información con mucha atención.
¿Era una viajera en el tiempo?
Solté la carpeta de una y miré mis manos, hice presión en ellas y estás desataron de nuevo ese color azul con una fuerza en mis puños.
—Siempre fui ella. —musité con una sonrisa.
Puse mis brazos los costados y miré un papel que estaba frente a mi, un papel que decían mis datos personales.
"Hija de: La encargada."
—¿La encargada? —musité para mí.
Y otra vez, un fuerte dolor de cabeza se apoderó de mi, tomé con mis manos esta tratando de calmarlo pero ahora fué algo demasiado fuerte, solté la hoja y me senté en el piso.
Unas imágenes se situaban en mi memoria, cómo si fueran recuerdos, cómo si yo estuviera en un lugar diferente y otras que estuve con una mujer que tenía el cabello blanco.
Solté un grito desesperado a eso, el dolor era increíble y un sumbido estaba en mis oídos.
Hasta que todo fué paz.
Abrí los ojos mirando a todos lados, era una calle con personas vistiendo como en los 80s, me sentía confundida y metros de mí estaba yo, sentada en una banca maldiciendo algo.
Me quedé paralizada y el sentimiento de querer volver me invadió, hice presión en mis puños y estos desataron el poder y en un momento a otro estaba otra vez en ese cuarto oscuro en el que había estado los últimos días.
—¿Todo fué un sueño? —miraba a mi alrededor y pude ver mi piernas que estaban libres.
Y otra vez, mi vista fué negra al sentir un trapo cubrir mi boca y su olor en mis fosas nasales.
Cinco H.
—¿Podrían darse prisa? —pregunté mientras caminabamos todos juntos por un callejón.
Ellos veían a su alrededor con terror.
—Es aquí. —se detuvo Klaus enfrente de una casa que tenía ese diseño anticuado.
Fruncí el ceño mirando la entrada y toqué el timbre de esta.
Nadie respondió.
Ahora opté por golpear la puerta.
Silencio.
—Voy a entrar —dije girando mi cabeza a un lado a ellos que estaban atrás mío.—
—¿Irás solo? No. —Dijo Luther negando.—
—Tampoco puedo llevarlos. —miré a Luther.—
Ellos se miraron entre sí y después asintieron muy poco convencidos.
Me teletransporté adentro y caí en la sala de la casa, miré a mi alrededor confundido analizando cada parte de ella.
Entonces unos golpes me hicieron esconderme detrás de un sillón.
—Esa estúpida niña, voy a matarla. —salió un hombre dirigiendose a otra parte de la casa.
Lo seguí con la mirada sin hacer algo tipo de ruido y ví cómo se dirigió a la misma dirección ahora con un cuchillo en mano.
Fruncí el ceño y se perdió en un pasillo.
___.
Abrí mis ojos con un fuerte de dolor en mi cuerpo, y ví mis brazos con unos moretones.
Solté un quejido de dolor al sentir mis piernas arder, estaban cortadas en rasguños y de repente la puerta se abrió.
Alcé mi mirada con mi vista borrosa y era ese hombre y portaba un cuchillo en mano.
Entré cerré los ojos con dificultad y solo pude apreciar como este caía al momento de acercarse y otro hombre estaba detrás de el con una hacha.
Fruncí el ceño tratando de ver con claridad pero un sueño me ganó por completo.
—Carajo ___, resiste. —alguien me tomó en brazos y pude casi reconocer esa voz.
¿Cinco?
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Tu Llegada De Un Gran Viaje. || 𝑪𝒊𝒏𝒄𝒐 𝑯𝒂𝒓𝒈𝒓𝒆𝒆𝒗𝒆𝒔 𝑻𝒖𝒂.
RomansaNosé en que momento llegué a este lugar exactamente, mis recuerdos son borrosos pero tengo bien presente el dia que caí en ese patio y mi vista cayó en la vista de ese niño con los ojos verdes sin saber su dura actitud pero siendo un niño cariñoso e...