Capítulo 15: Sábado Pt. 2.

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Draken's POV:

Eran las 18.30, ya estaba atardeciendo. Por un momento pensé en abrir mis mensajes y escribir a Nezuko para hablar con ella, pero no me pareció buena idea.
Me quedé un rato apoyado en el asiento de la moto, todo estaba en silencio hasta que escuché unos pasos detrás de mí, no les presté atención hasta que se pararon en seco y yo giré mi cabeza para ver quien era. Una coincidencia oportuna.

Nezuko.

-Ryuguji.- Me giré de golpe, tenía una expresión sorprendida pero ahora la había cambiado a una molesta.-¿Qué haces aquí?

-Yo, emh...- Verla me puso realmente nervioso, comencé a rascar mi nuca y no podía mirarla a los ojos.-Vine a ver a Mikey pero ya se ha ido.- Aclaré mi garganta antes de levantar la mirada.-¿Podemos hablar?- Se permitió unos segundos para dudar antes de responder, se me hicieron eternos. Comenzó a andar de nuevo y cuando llegó a mi altura habló.

-Suelo venir aquí siempre que puedo para ver el atardecer, no es un punto muy alto pero se ve bien igualmente.- Siguió andando hasta llegar a las escaleras, subió el primer escalón y miró hacia mí.-¿Vienes?- Me aparté de la moto y la seguí, ella al ver que la seguía continuó subiendo. Pasamos la puerta torii y nos dirigimos a unos bancos al lado del templo. Tenía razón, el atardecer se puede ver perfecto desde aquí. Estábamos cada uno en una esquina del banco, completamente contrario a todas las veces que hemos estado juntos. Nos pasamos un rato en silencio hasta que el cielo se puso completamente naranja.-¿Qué querías decirme?- Su mirada seguía al frente, estaba seria, parecía completamente indiferente a lo que había a su alrededor pero su voz la traicionaba, estaba dolida. Aclaré mi garganta antes de responder.

-De lo que pasó ayer. Yo n-

-¿Por qué no me dijiste que tenías novia?

-Porque nunca la tuve. Nez-

-Pero tenías algo con Emma, ¿no? Por eso se puso así ayer.

-Sí, es complicado. Nunca llegamos a ser realmente nada, per-

-Eso no quita que hubiera algo y que te has olvidado por completo de los sentimientos de las dos.- No dejaba de cortarme cada vez que intentaba hablar, pude recordar las palabras de Mikey, "Al parecer ya se vio en situaciones parecidas a la de ayer".-¿Por qué volviste al Café si la tenías a ella?- Me quedé embobado mirándola, si aceptó hablar conmigo es porque Mikey la convenció, no porque ella quiera estar aquí. No solo está dolida, también está incómoda. El sonido de su teléfono me sacó de mi trance, ella miró quién era y colgó. Suspiró y se levantó.-Olvídalo, mejor me...

-Nezuko.- Me levanté y agarré su muñeca para evitar que se fuera, se quedó quieta, dándome la espalda.-Sé que tenías pensado no hablar conmigo, así que no te haré perder el tiempo.- Su brazo se destensó y lo solté, ella se quedó donde estaba.-Es cierto que hubo algo entre Emma y yo, pero también es cierto que chocamos muchísimo. La mayor parte del tiempo estamos peleados y lo peor es que es por tonterías. Me cansé de que eso fuera lo normal en mi día a día y que todo el mundo se lo esperara de nosotros. Es cierto que lo hice mal y que tendría que haberlo hablado con ella, pero...- Aún teniéndola de espaldas me ponía muy nervioso decirle esto. Chasqueé la lengua mientras me frotaba la nuca y ella se dio la vuelta, poniéndomelo más difícil.

-¿Pero?- Cruzó sus brazos por delante de su pecho.

-No sé qué tienes que desde el primer momento que te vi me gustaste y, cuando volví al Café, solo conseguí que me llamaras más la atención. Me olvidé de todos y de todo, ahora me toca pagar las consecuencias de mis actos. No sé porqué volví, solo sé que algo me dijo que lo hiciera.- Intentaba mantener su semblante serio pero su rubor la delataba. Apartó su mirada de la mía y se dirigió a la puesta de sol otra vez.

Draken • Ken RyugujiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora