Boobs || rodrivan

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Rodrigo.

-Ese chico tiene los pechos más hermosos que he visto.

-Rodrigo..

-¿Y viste su piel? ¡Es tan clara y suave!

-Rodrigo..

-Su trasero es.. una bendición.

-Rodrigo..

-Y sus pechos son los más grandes y hermosos que he visto.

-¡Rodrigo!

Tomás, mi mejor amigo, grita tan fuerte que me devuelve a la realidad.

-Perdón, ¿Estabas hablando?

-Si, te estaba pidiendo que por favor dejes de babearte por uno de los jugadores del equipo contrario. Se supone que viniste a apoyarme a mí.-Tomás se cruza de brazos e inspecciona la hora en su reloj procurando no llegar tarde al juego.

Faltaban unos minutos para que el partido tuviera lugar en el campo universitario. Leyes vs Arquitectura, seria una batalla campal.

-Es que míralo, ¿cómo puede ser que alguien tan jodidamente caliente haya pasado por delante de estos ojitos y no me haya dado cuenta?

-Debe ser de primer año, se ve muy jovén.-Opina Tomás observando al chico pelinegro recostado contra los casilleros y riendo junto a sus compañenos de equipo.

-Se ve muy follable.

Observe su cabello pelinegro con pequeñas ondas que caía desprocupadamente por su frente y su sonrisa, su jodida sonrisa era algo celestial.

Pero claro, el rostro no me importaba mucho, si me enfocaba únicamente en su cuerpo especialmente en la zona de sus ardientes pectorales y el uniforme azul del equipo si que le hacia justicia a sus curvas.

-Iré a hablarle.

-Hazlo, quiero ver como te manda a la mierda.-Tomás se burló y yo le mostre el dedo del medio.

Agradecia que sus compañeros ya se hayan ido y pase mi mano por mi cabello, justo antes de plantarme frente a él.

-Sí, eres mucho más sexy de cerca.-Lo mire de arriba a abajo, mi mirada posandose en su pecho. Sus pectorales eran tan grandes que se asimilaban a los de una chica. Solo quería apretarlos y besarlos.

-¿Disculpa? ¿Te conozco?

-No, pero me gusta la honestidad. Así que te dire que no me interesa conocerte, ni que me conozcas, sólo quiero que me dejes tocar tus pechos.

-¿Qué?.-El pelinegro hundio sus cejas desconcertado.

-Te pagaré si quieres, sólo sera un leve apretón.

Él dio un paso atrás sin saber que decir o hacer.

-P-pero yo no soy una mujer.

-Creo que es obvio que estoy enterado de eso. Así que.. ¿que me dices?

-¡Ni siquiera se cómo te llamas!.-Exclamó él espantado.

-Soy Rodrigo y por lo que me dice tu camiseta, tu nombre es Iván.-Señalo su prenda de ropa.- Asunto arreglado, ¿quieres coger en el baño?

-Podría golpearte.

-Pero aún no lo has hecho y eso significa que también lo quieres.-Sonreí orgulloso.

Ivan endureció su madibula y me aparto de manera brusca.

-Maldito pervertido.-Masculló y se marchó al campo de futbol.

Tomás aparecio a mi lado y apoyo su codo en mi hombro.

-¿Y como estuvo?

Observo a Iván recibiendo un balón y comenzando a practicar. Sus piernas tampoco estaban nada mal.

-Creo que le gusto.-Afirmé.

No descansaria hasta tocar los pechos de Ivan y no importaba lo que tuviera que hacer para lograrlo.