Iván
Ser homosexual estaba mal, que te gustara alguien de tu mismo sexo era algo antinatural.
Crecí con ese pensamiento, mis padres jamás fueron de mente muy abierta y las personas a mi alrededor no solían hablar mucho de eso a menos que fuera para lanzar uno que otro comentario no muy agradable.
En la escuela, los gays eran objeto de burla y en la universidad tan sólo el primer día de entrenamiento fui recibido con una advertencia.
-No te acerques tanto a Pedrito.- Me había susurrado Juan después de que nos haya visto.
-¿Por qué?.- Fruncí el ceño.
-¿No lo sabes? Es gay.- Dijo con una mueca de desagrado.
-Oh, en serio.- Miré a Pedrito sin entender pues el lucía normal.- No tenía idea.
-Ten cuidado o podría enamorarse de ti.- Me advirtió otro de los jugadores.
Todos estábamos estirando en una ronda menos Pedrito que lo hacía aparte y sólo ahí me percaté de que eso no era su elección. Nadie lo quería tener demasiado cerca.
Aunque yo claramente no era como él ni mucho menos tenía sus gustos, tampoco era tan perverso como para dejarlo de lado.
-¡Ey, Pedrito!.- Llamé la atención del pelinegro.- Ven aquí, te guardé un lugar.
Palmeé el piso y él hundió sus cejas confundido, pero de inmediato cambió su expresión por una sonrisa y tomó asiento junto a mí.
Mientras que mis compañeros imponían distancia entre Pedrito y ellos durante el entrenamiento, pensaba que él era muy fuerte pues yo jamás aceptaría ser el objeto de burla de nadie.
Suficiente era la discriminación que sufría por mi bajo estatus económico y no deseaba que la popularidad que había creado a pesar de aquello se viera afectada.
Pero no importaba porque a mi no me gustaban los chicos, ¿no?
Eso intentaba hacerme creer mientras observaba a Rodrigo limpiarse el sudor de su torso descubierto con la camiseta del equipo.
Tragué en seco y no pude evitar observarlo de arriba abajo. Su piel trigueña brillaba por el sudor y se veía tan suave como la recordaba, tanto que mis dedos picaban por sentirla.
Justo en ese momento sentí un balonazo en la cabeza y recordé que estaba delante de la fila que formaban los jugadores para lanzar tiros a la canasta.
Me disculpé y me posicioné en la fila seguido de Pedrito. Como continuaba con mi vista fija en Rodrigo, visualicé como tomaba una toalla de las que estaban apiladas y se acercaba a ambos.
Mi corazón se descolocó de su lugar y retumbó contra mi pecho.
Él era tan dulce, siempre se preocupaba por mí.
Extendí mi mano, pero fue Pedrito a quien entregó la toalla. Al instante, oculté mi brazo avergonzado y me sentí algo... decepcionado.
Joder, ¿por qué me sentía de esa forma?
Debería estar bailando de alegría.
Ayer Rodrigo me confesó que ya no gustaba de mí, pero que de igual forma me ayudaría con el asunto del departamento y de mi beca.
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Boobs || rodrivan
Acak-¿Iván, puedo tocar tus pechos? -¡Rodrigo, te he dicho que no soy una mujer! Dónde Rodrigo tiene una gran obsesión con los "pechos" de Iván. ☆ adaptación autorizada por @hollye2018 de @-popstarr | contenido +18. ☆ rodrigo top | iván bottom.