Realidad

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[AU de la peli, Ballister deja su entrenamiento como caballero debido a su lesión (referencia a como pierde su brazo en el cómic)]



- Narra Ballister -


Ser un caballero era mi sueño desde que tengo memoria, estube a punto de lograrlo, y lo hubiera hecho... de no ser por ese "accidente".




Mis memorias de ese día son muy perturbadores... recuerdo haber salido victorioso en un duelo del coliseo, otro combate estaba sucediendo a metros del mío, al terminar ayude a mi compañero y a mis espaldas escuché un arma dispararse, voltee rápidamente y eso fue mi sentencia... el arma impacto directo en mi brazo; destrozándolo... el dolor fue agonizante, y todo lo que pude oír fueron los gritos de los caballeros, mientras trataban de ayudarme pude ver a alguien a lo lejos, se veía borroso pero se notaba muy preocupado y pude ver qué su imagen brillaba, y luego salió corriendo del lugar, asumí que era el responsable pero no pude reconocerlo, minutos después caí inconsciente.

Desperté en un hospital del reino, mire a mi alrededor y al ver mi cuerpo no podía creer que había perdido mi extremidad, fue un golpe muy duro para mí; tiempo después recibí una visita de la directora... la cuál recomendó que no regresara al entrenamiento una vez me recupere, creí que lo decía pensando en mi bienestar pero una vez mis heridas sanaron me presenté en el castillo y me rechazaron al instante, insistí pero no me aceptaron, habían órdenes estrictas de la directora y de la reina sobre no dejarme regresar.

Mi sueño se había acabado, si eran órdenes de la reina no podía hacer nada, su palabra es la ley y lastimosamente eso implica olvidarme de mi sueño; no tuve más opciones, me retire del castillo y busque un trabajo para mantenerme, logré ahorrar lo suficiente y en dos años conseguí alquilar una casa, también gracias a mis habilidades no tuve que preocuparme por conseguir una prótesis, yo mismo la confeccione en mis tiempos libres, ahora sin ningún impedimento físico pensé en regresar al castillo, y en efecto lo hice, pero la respuesta fue la misma.

Bueno... ahora no puedo seguir insistiendo, no puedo hacer nada más que regresar a mi rutina de siempre y aceptar mi realidad como un ciudadano más del reino.

Pasaron unos meses desde mi última visita al castillo, mi día continuó como siempre, y al llegar la tarde alguien tocó mi puerta, al abrir no ví a nadie en frente, baje la vista y había una bebé en mis pies, la recogí rápidamente y salí en busca de la persona que la había dejado; no tuve suerte así que regresé adentro, no sabía que hacer no tenia ninguna idea de cómo cuidar un bebé, y para rematar no tenía nada en casa para cuidarla.




- Cielos... vaya situación ¿que hago? ¿debería llamar al orfanato?- parecía que me entendía ya que al escucharme decir orfanato la bebé comenzó a llorar- ¡Oh! Rayos, está bien está bien, shh no llamaré a nadie, vamos calma, todo está bien- la puse sobre mi hombro y un par de palmadas fueron suficientes para que se calmara- wow... eso fue rápido, pero no creo que me dejes entregarte ¿verdad?- la puse entre mis brazos y ella solo me miró- ... haa de acuerdo, cuidare de ti por un tiempo, pero ahora tú y yo nos iremos de compras.



Salimos de casa y extrañamente encontré dinero en el piso de la puerta, voltee a ver si alguien lo había perdido pero al parecer fue una grata coincidencia, lo tomé y me dirigí al mercado a comprar todo lo necesario, más bien todo lo que podía permitirme, una vez conseguí todo de camino a casa pensé de dónde sacaría los muebles para la bebé.



- Mmm... los materiales pueden salir de la naturaleza, pero tomará demasiado tiempo, además es muy pequeña para que la deje sola en casa, piensa piensa ¿que puedo hacer?... Oh por supuesto, material reciclable.



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