Cuando las puertas de la casona se abrieron, Jimin sintió que de nuevo el aire abandonaba sus pulmones, Eunwoo se estacionó cerca de la entrada y luego salió del auto para ir a abrir su puerta. El omega no puso resistencia alguna mientras el alfa lo tomaba de las manos bruscamente y lo sacaba jaloneándolo hasta llegar a la entrada. El azabache trató de seguirle el paso mientras entraban. La luz del interior de la casa le cegó los ojos, por lo que no vio la pata de uno de los sofás y se terminó tropezando y cayendo de narices al suelo.
—Aquí está, tal como lo prometí —murmuró Eunwoo soltando sus manos y dejando que Jimin se recargara en el suelo.
El aroma a tabaco hizo que Jimin sintiera náuseas, sabía que su madre estaba frente a él. Tardó unos segundos en armarse de valor y alzar la mirada, la mujer lo miró con una sonrisa burlona antes de acercarse y tomar su rostro con una mano, clavándole las uñas en la mandíbula. El menor evitó quejarse a pesar de que sintió que su piel ardía.
—Te dije que no te volvieras a intentar salir con la tuya, Park Jimin —murmuró. —Ahora lo único que te va a salvar el pellejo es casarte cuanto antes con Eunwoo, comenzaremos a planear la boda mañana mismo.
»Mírate, eres un asco, ¿no pensaste que vivir con otro alfa te quitaría la poca clase que tenías? Has subido de peso, eres feo y rebelde. Tienes suerte de que este alfa siga queriendo casarse contigo, lo hiciste sufrir mucho cuando te fuiste...
—No le hagas nada —interrumpió el omega al monólogo de su madre, con voz ahogada.
—¿De qué carajo hablas? —alzó una ceja notando que no parecía estar prestándole atención.
—A Jungkook, no le hagas daño, por favor —suplicó tragándose todo su orgullo, ahí, de rodillas frente a ella. —Haré lo que quieras, pero no le hagas nada.
—Si prometes casarte con Eunwoo sin chistar, no le haré nada —mintió descaradamente, pues sabía que su hijo estaba enamorado, y por ende, desesperado, por eso se aprovechó de la situación.
El miedo era la herramienta más efectiva cuando querías que alguien te hiciera caso y ella lo sabía. Conocía bien el corazón sensible que poseía el omega porque en vida, su marido siempre se lo mencionaba, como si fuera algo para enorgullecerse. Ella creía todo lo contrario.
Jimin asintió a pesar de que la mano de su madre seguía sosteniendo su rostro.
—Lo haré, me casaré —musitó sin pensarlo demasiado.
Una sonrisa adornó el rostro de la mujer mientras asentía y luego separó la mano para después soltarle una fuerte bofetada. Jimin nuevamente no se quejó, pero su rostro se ladeó haciéndolo dar un respingo. Luego, otra cachetada llegó haciéndolo girar hacia el otro lado.
Eunwoo frunció las cejas al ver como la mujer comenzaba a darle varias cachetadas y golpes en la cara a su hijo, sin que este hiciera nada para defenderse. Por un momento sintió la necesidad de protegerlo, pero no se atrevió a acercarse.
—Esto es para que aprendas a no volver a desafriarme, Jimin, tu padre está muerto y punto. Acéptalo, soy yo quien manda ahora.
El omega soltó un pequeño suspiró, lastimero cuando el último golpe llegó. Nunca se había dejado golpear tanto por su madre, pero sus fuerzas estaban drenadas y no quería siquiera responderle nada. Estaba asustado y no podía dejar de pensar en su cachorro y todo lo que podía suceder si cometía algún error en ese momento. Cuando ella finalmente se apartó, miró a Eunwoo.
—Llévalo a su habitación y avísale a Hoseok que ya lo encontraste para que venga a cuidarlo, no quiero tener que lidiar con él. Ahora no tiene energías, pero sabes como es.
ESTÁS LEYENDO
Predestined Love 𐦍 KookMin 「Omegaverse」
FanficJimin jamás imaginó que se encontraría con su alfa predestinado después de que su padre muriera y su madre quisiera obligarlo a casarse para mantener la empresa familiar en pie. Jungkook jamás se imaginó que se encontraría a su omega predestinado y...