Muchas veces el matrimonio es la muestra más especial y romántica de sellar el amor entre dos personas y en el peor de los casos para sellar un trato. Pero, ¿qué pasaría si en ese matrimonio arreglado uno de ellos se enamora y el otro no?
•Hyunho
•...
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—¡Hyunjin!—llamo desde la habitación—¡Hyunjin-ah!
Hyunjin se encontraba en el baño terminando de bañarse. Había pasado dos días con Minho pegado a él, hasta ya lo había llenado de su olor y este mareaba un poco al joven omega.
Nunca pensó que un alfa fuera capaz de comportarse como un cachorrito necesitado de atención estando en celo. Su padre no era así, él era rudo y demandaba placer o al menos eso le decía su madre.
—¡Hyunjin-ah~!—lloriqueó Minho desde la habitación.
—¡Ya voy!—seco su larga cabellera y salió del baño encontrándose con Minho sentado en medio de la cama esperando por él.—¿Ya estás listo para bañarte?—el alfa negó-Necesitas bañarte, la calentura aún no se te baja del todo. Un baño seguro te ayudará.
—Quiero a omega.—gruñó
—Alfa malo, ya te dije que no me gruñes—se cruzó de brazos viendo al alfa con el ceño fruncido.
El alfa cambio su expresión a una más calmada. Extendió sus brazos hacia el omega esperando a que se acercara a él.
Hyunjin suspiró y camino hacia la cama.—¿Te vas a bañar?—Minho negó, tomándolo de el brazo jalándolo hacia él.
—Te quiero a ti—susurró, su voz un poco más ronca de lo que era causándole un escalofrío a Hyunjin.
—¿A...a mi?—Minho asintió.
El alfa lo tomó por la cintura haciendo que Hyunjin se sentará a horcajadas sobre su regazó. Lo abrazó con fuerza y acercó su rostro al cuello del menor inhalando su aroma.
—Mío—gruñó.
Tomándolo por las caderas, Minho comenzó a mover a el omega encima de él causando fricción en su miembro, el cual empezaba a doler debido a la falta de atención.
Hyunjin se sorprendió por el atrevido movimiento de el alfa, abriendo sus ojos en asombro.—Min...Minho, détente.
El alfa hizo caso omiso y continuó moviéndolo arriba de su ereccion, gimiendo en el proceso.—Hyunjin-ah
Hyunjin, con un poco de timidez, colocó sus manos en los hombros de Minho. Su propia ereccion estaba necesitada de atención. Jamás había sentido algo así y se sentí muy avergonzado. Sus mejillas estaban rojas, su boquita medió abierta mientras jadeaba.
Minho aceleró sus movimientos, haciéndolos bruscos y desesperados. Con sus propias caderas fingió dar embestidas a el omega, quien reposaba su cabeza en el hombro de el alfa.
Minho quería más, quería quitar la espantosa ropa que les estorbaba pero sabía que él omega aún no estaba listo para ello. Con su lado humano aún tomando el control y con todas sus fuerzas posibles, se control de querer arrancarle la ropa a Hyunjin y hacerlo suyo en ese mismo instante. Le había prometido tratarlo con cariño y así lo iba hacer.
