Tormenta.[EDITADO]

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-Querido amor

Ok, ok ya puedo contarte todo, en realidad fue divertido quedarme allí con él. Puede que suene cliché, pero, estaba haciendo tanto frío y no tenía abrigo que él me dio el suyo, fue un gesto muy lindo y me dieron ganas de besarlo (spoiler: si lo hice).

Luego de quedar varados en plena carretera y yo muerta de la vergüenza por la conversación que tuvimos, me dispuse a avisarle a mi madre de lo sucedido; y como raro no le importó y me dejó un simple, "de acuerdo". Habíamos quedado aproximadamente a 20 minutos de mi casa, pero, por la tormenta y el clima, era imposible transitar. Michael ya le había avisado a su padre y estábamos preparando el carro para dormir ahí, menos mal teníamos un poco de comida, porque moría de hambre.

-Así que Josefa, ¿tienes algo en mente para hacer en lo que nos quedamos aquí?

-Mmm, en realidad no, luego de las clases contigo y tu hermana, quedé exhausta y no puedo ni pensar.

-Vale, ¿Qué te parece si jugamos a preguntas y respuestas?

-Está bien, empieza.

-Sabes que debes ser sincera con tus respuestas ¿no?

-Si lo sé, ya he jugado este juego Myers.

-Bien, señorita sabelotodo.

Nunca me imaginé que la pregunta que me haría sería tan directa.

Literalmente quedó así :(o)

- ¿Puedo besarte?

-Mmm si, espera ¿Qué?

-Me refiero a ¡no!, no quiero.

- ¿Estas segura linda?, si te acuerdas, dijiste que sí, ahora me debes un beso.

-yo no te debo nada y no me digas linda, soy Josefa Brown, apréndetelo Myers.

-Vaaale, Josefa Brown, vas tú.

-Mmm ¿Querías besarme?

-Si.

- ¿Por qué?

-Porque me gustas, Josefa Brown y hace mucho tiempo que quiero hacerlo.

No podía creer lo que me decía, era algo que llevaba soñando desde que lo conocí.

Por fin se te cumplió el milagrito, ehh.

¡Ya cállate conciencia!

-Eee, no sé qué decirte.

-Yo sí, sé que también te gusto y que al igual a mí, mueres por besarme.

- ¿Sabes qué?, tienes razón.

No sé de dónde saque las agallas, pero, lo tome del cuello, acercándolo a mí ,y lo besé, fue aún mejor cuando vi que me correspondía, jamás había besado con tanta intensidad, nuestros cuerpos irradiaban deseo, de pronto el frío se fue y llegó a mí una oleada de calor que se extendió por todo mi cuerpo.

- ¿Quieres esto Josefa?

Esa pregunta salió entre jadeos de su boca, lo que avivaron más mi interior y a la pasión que sentía estando con él.

-Mmm sí, claro que quiero.

Mientras seguíamos con nuestra complicidad, sentí como llevaba una mano a mi trasero y fue cuando me di cuenta de que este no era el momento.

-No Michael, espera, no puedo.

Michael dejo de besarme, inmediatamente después de que le dije que no podía.

-Tranquila linda, no tengo prisas.

Y lo que pensé que iba a ser incómodo se convirtió en algo lindo y especial.

- ¿Sabes?, besas genial.

-Gracias, lo mismo digo de ti.

Y ya salió a relucir la vergüenza.

-Este Josefa, sé que este no es el mejor lugar o momento para decírtelo ,pero no aguanto las ganas de que estés conmigo, ¿Quieres ser mi novia?.

-Ay, pero claro que sí.

Esta vez fue un beso más tierno y dulce. Y con eso nos dispusimos a ir a dormir.


A la mañana siguiente, él me dejó en mi casa y me prometió que saldríamos juntos.

Ay amor, juro que me sentí muy feliz, al aceptar ser su novia .
Nunca me había sentido tan alegre y ¿adivina qué ?, me quedé con su jersey y lo llevo puesto en este momento porque huele a él, ha pasado un día desde la tormenta y hemos estado hablando sin parar y deseando vernos.

Juro que estoy muy feliz amor, ya sé que se siente ser correspondida y me encanta, espero que me ayudes a que todo salga bien.

Josefa.

CARTAS AL AMOR.[EDITADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora