✾ Capitulo 25 ✾

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El viaje a Rusia fue de imprevisto.

- Vik... es mamá, está enferma y ruega por verte.

Esa frase se repetía una y mil veces en su cabeza, era un viaje largo y por suerte Horacio lo acompañaba, tenia su mente en todos los recuerdos del pasado su corazón palpitaba fuertemente sintiendo un gran dolor en su pecho.

Quería hablar con ella, necesitaba estar a su lado y decirle que no le guardaba rencor que a pesar de sentirse algo dolido porque también pensaba que era algo bueno que se case con aquella joven y que de algún modo intentó convencerlo que seria lo mejor.

- Tranquilo cariño, pronto la veremos.

El mayor hizo una mueca y agradeció el apoyo, se sentía aliviado por tener a alguien a su lado y sin duda le reconfortaba su presencia. El resto del vuelo se hizo eterno, se sentía inquieto y lo único que deseaba era ver a su madre y abrazarla.

Al llegar al aeropuerto fueron recibidos por Aleksandra que al solo verlos corrió a abrazarlos.

- Me da mucho gusto verlos de nuevo.

- Igualmente - Respondió el menor bastante alegre.

- ¿Cómo está? ¿En donde está?

- Tranquilo Vik, iremos a verla.

Llegaron a la casa de su hermana siendo recibidos alegremente por Lena y Alexei.

- Tío Viktor, Tío Horacio - Gritaron emocionados.

Ambos niños se lanzaron a abrazarlos con enormes sonrisas en sus rostros completamente emocionados por verlos de nuevo, Horacio los recibía en brazos sintiendo su corazón lleno de alegría.

- Bien, comamos algo y vamos.

.

- Tranquilo, ella estará bien - Aseguró Alex frente a la puerta de la habitación.

Tragó saliva sintiendo un nudo apretar su garganta, se sentía ansioso y después de un par de segundos ingresó. Su madre se encontraba en la cama, una maquina monitoreaba sus signos vitales haciendo que se sienta más ansioso.

Se acercó lentamente, no veía a su madre en un largo tiempo y su pecho empezó a oprimirse, se quedó junto a la cama y tomó la mano de su madre.

- Mamá, estoy aquí - Tragó saliva - Soy... soy Viktor, tu hijo.

La mujer despertó lentamente y al hacer contacto visual con aquellos hermosos grises sonrió con lagrimas en los ojos.

- Mi pequeño Viktor - Dijo suavemente acunando el rostro de su hijo - Creciste mucho, y estás más guapo.

- Me alegra verte ¿Cómo te sientes?

- He tenido tiempos mejores, pero estoy bien, te tengo a mi lado así que estoy bien.

- Mamá...

- Perdón, por no ser lo suficientemente valiente como para defender tus sentimientos y poner tu felicidad encima de cualquier cosa - Tragó saliva para continuar - No debí intentar convencerte y cuando ya no te vi en casa supe que hice muy mal en no apoyarte, así que espero que puedas perdonarme.

- No te preocupes madre, no tengo rencores, sé que lo hiciste porque papá te presionaba.

Irina respiró profundamente - Sé que Gavrel fue a verte, le dije que te deje tranquilo pero es un cabezota.

- Si...

- También me dijo que conoció a tu pareja.

- Si, pero no le agradó mucho.

Inocente amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora