Totalmente

Desconectada del mundo

La mañana siguiente llegó y el señor Waterhouse llamó a Lisa y a Tzuyu para verlas en su casa.

—Pase — dijo Tzuyu cuando abrió la puerta.
—Gracias — respondió el señor Waterhouse apenado.

Los tres se sentaron en la sala y en silencio.

—Lamento lo de ayer. Ustedes son de mi más alta confianza, y quiero confesar que no es cierto — dijo el señor Waterhouse —¡Esa persona no soy yo! ¿Por qué pondrían fotos borrosas donde no se definen bien los rostros? ¡Por dios, soy casado! Tengo hijos, una esposa a la cual amo y ahora está desconfiada de mi, es lo peor que me ha podido pasar — el señor Waterhouse cubrió su rostro con frustración.
—Sabemos que es mentira — dijo Tzuyu.
—Nuestras preventas han ido en picada desde ayer y tendremos que cerrar la productora. Me siento culpable por la noticia y porque ahora sus nombres están manchados.
—Deberíamos meter una demanda — sugirió Lisa.
—Es lo que pienso hacer — el señor Waterhouse suspiró —Pero ese canal es fuerte, no será fácil ganarles. Mientras hago la demanda tendré que despedir a todos, cerrar y ver qué será de nuestra suerte.

Dos horas después, Jennie y Tzuyu estaban con Lisa frente a la puerta de Jisoo esperando a que abriera.

—Adelante — dijo Jisoo en cuanto abrió la puerta.

Jisoo tenía los ojos rojos, las ojeras marcadas y se veía triste. Jennie fue la primera en entrar dirigiendo una mirada pesada a la chica, Tzuyu fue la segunda y se acercó al oído de Jisoo.

—Guarda tus lágrimas para después, prepárate para lo que te espera — susurró.
—Tzuyu... — advirtió Lisa.
—No me defiendas — dijo Jisoo sosteniendo la postura ante Tzuyu.
—No te estoy defendiendo, quiero que guarde sus palabras para otro momento, solo nosotras sabemos lo que es verdad.

Lisa entró después de Tzuyu y subieron a la habitación. Las chicas comenzaron a guardar las pertenencias de Lisa en cajas de cartón.

—Señorita Manobal ¿Gusta que le ayude? — era Mary entrando a la habitación.
—Hola, Mary — Lisa sonrió —Estoy bien, gracias.

Mary asintió cabizbaja y salió de la habitación.

—Sigo pensando cómo es que Jisoo publicó tal mentira aún estando contigo — dijo Jennie.
—Si fuera ella, tú serías mi primera fuente — agregó Tzuyu.

Jisoo tocó la puerta de la habitación.

—Saldré durante una horas, si olvidas algo dile a Mary.
—Gracias — respondió Lisa.

Los meses pasaron y Lisa estaba sumergida en una gran depresión, Tzuyu se mudó tres meses después de la gran noticia, se mudaría un tiempo con sus padres, Jennie había regresado a Londres preocupada por el estado mental de Lisa. Mientras tanto, Lisa solo vivía de los ahorros que tenía y del dinero extra que el señor Waterhouse le pagaba. Los mensajes entraban a la contestadora de Lisa sin respuesta alguna.

Lisa despertó una mañana y presionó el botón del teléfono para escuchar los mensajes que había acumulado durante meses mientras preparaba su desayuno...

"¡Hola! Soy Lisa, deja tu mensaje y responderé más tarde".

Era la voz de Lisa en la contestadora.

—Hola, Lis — era Tzuyu —Ah... — suspiró —Estoy preocupada por ti, no contestas los mensajes, los vecinos han dicho que no has salido del departamento desde hace más de un mes. Afortunadamente saben que estás viva gracias a la música fuerte que pones los fines de semana — rió —Pero quiero ver a mi amiga, llámame.

—¡Hola, Lisa! Soy Jenna, tiene mucho tiempo que no nos vemos desde que nuestra productora cerró. Haré una pequeña reunión el día de mañana, espero puedas asistir, adiós.

—Buenos días — era la señora McAlister —¿Estás bien, hija? Estuve un poco mal de salud y apenas pude contactarte. Me enteré de lo que pasó, espero y puedas recuperar tu popularidad y arduo trabajo, hasta luego.

—Hola ¿Reconoces mi voz? — Lisa sonrió —Soy Rosé, ¡Estoy en Nueva York al fin! — rió apenada —Llámame y tal vez podríamos salir a tomar algo, besos.

—Soy mamá... Tú tía, como sea — rió —Tu tío y yo estamos preocupados por ti. No has venido a visitarnos desde hace cuatro años y nunca pudimos conversar contigo respecto a lo que sucedió con tu productora, regresa a casa, sabes que estamos para ti. Llama en cuanto estés bien, te quiero.

—Hola — Jisoo soltó un gran suspiro y Lisa detuvo su acción de servirse café —Sé que no debería llamar, realmente estoy avergonzada por lo que pasó. Me enteré de que la productora cerró y te quedaste sin trabajo por mi culpa de involucrar a todos en esto. Lo siento, extraño tenerte a mi lado cada mañana, sé qué hice mal y no será fácil perdonarme pero mi jefa solo me pidió hacer mi trabajo, aunque quién redactó todo fui yo, en fin... — hubo un corto silencio —Si es que puedes perdonarme... Me gustaría que nos volviéramos a reencontrar, y si no lo haces prometo que si alguna vez nos cruzamos por la calle pido que podamos comenzar desde cero.

Lisa se sentó en el sofá y abrió todas las cartas que Jennie había enviado, no abrió ninguna desde que Jennie se había ido.

"Mi amada Lizzi.

Estoy preocupada por ti, el ver tu rostro en el aeropuerto cuando fuiste a dejarme realmente me dejó pensando, te veías tan decaída. Conociéndote sé que esto tardará meses, solo pido que no te dejes caer y busques trabajo. Tal vez no en una productora pero cambiar de ambiente tal vez te haría bien.

Con amor, Jen"

"Mi amada Lizzi.

¿Por qué no contestas mis cartas? Tzuyu me dijo que no has salido de tu departamento en meses, pero al menos todos sabemos que estás con vida y eso es algo bueno.

¿Puedes contestarme? Es extraño."

"Mi amada Lizzi.

He estado pensando en si seguir mandando cartas para ti, siento que hablo con un fantasma o que solo mis cartas llegan a un punto vacío y muerto. Jenna dijo que no asististe a la reunión.

¡Amas las fiestas! ¿Por qué no irías?

Solo pido que puedas responder alguna de mis cartas, cuéntame cómo te sientes, que has pensado, qué piensas hacer ahora, no lo sé. Solo dame una señal..."