🍃ᴇʀᴇs ᴍᴜᴄʜᴏ ᴍᴀ́s🍃 Hipo X Male Reader.

30. Concentrar, Encuentra, Concentrar.

"Focus, Finds, Focus."

Estaba sentado en un tronco de madera mientras comía su desayuno como un desesperado. El arduo entrenamiento despertaba su apetito, cansaba su cuerpo y hace tiempo, algunos años, no entrenaba tan arduamente. Su cuerpo había perdido la costumbre, por ende, el resultado natural era agotamiento extremo.

Su desayuno consistió de pan y muchos, pero muchos huevos revueltos que Agnar le preparó con mucho cariño. El amigo de su padre siempre estaba ahí para él, era casi familia. A veces pensaba en cómo le gustaría que Agnar fuese su papá en vez de Oddvar.

Estaba masticando un poco de pan con huevo revuelto cuando vio al hombre que había preparado el desayuno riendo cual niño pequeño con nuevo juguete o con... Una broma maliciosa en mente. Mientras se acercaba a él, empezó a sacudir algo que sujetaba con cuidado ¿Una carta? No. Varias.

-Que inesperada sorpresa... Te llegó correspondencia ¡La trajo un terrible terror! Novedoso... — Dijo con una mirada que lo hacía parecer como si supiera o esperara algo muy específico. El terrible terror estaba sentado sobre su casco.

Correspondencia, eso era algo que... No podías mentir, estabas esperando. Tragaste lo que estabas masticando y empezaste a revisar las cartas. Había una de Astrid y Brutilda, una de Brutacio y una de... Hipo. Ante eso, respiraste hondo y decidiste dejarla para el final, con mucho cuidado leíste las otras, de vez en cuando te reías, otras solo suspirabas con nostalgia. Eventualmente, tuviste que, por si o por no, abrir la carta de Hipo para poder leerla.

- Es de Hipo...

- ¡Ah ese es tu novio! ¿No?

Rodaste los ojos y empezaste a leer mientras terminabas tu enorme y nutritivo desayuno. Tu carta había empezado de forma inmediata, directo al grano. La de Hipo estaba bien estructurada. Pues empezó con un...

"Mi querido (T/N)."

Casi te atoraste con el pan mientras leías, Agnar empezó a reír un poco ante tu reacción. Masticaste bien, tragaste y seguiste con tu lectura. No estabas esperando ese nivel de... Cuidado a los detalles y el hombre con piel morena, bronceada gracias a pasar demasiado tiempo afuera, no podía esperar por qué le dijeras todos los jugosos detalles. Claro, solo si querías hacerlo.

"Tus palabras realmente me hicieron sentir especial, me hicieron sentir importante y aprecio que mi opinión y mis palabras te importen tanto y.... Que tuvieran un impacto positivo en tu vida."

Sonreíste al leer eso, Hipo siempre tan sincero, tan agradecido por la más mínima demostración de respeto u aprecio. Te dio ternura y calmó tu corazón. Estabas nervioso por lo que debías hacer, leer eso te dio un momento en el que te permitiste simplemente sentir ese calor y alegría que Hipo producía en tu pecho cada vez que pensabas en él.

"No te preocupes, te dije que yo entendía tus razones. Aunque no las apruebo totalmente (porque me inquieta que algo te suceda), lo comprendo, lo respeto y confío en que volverás como prometiste. Solo me queda esperar y sabes bien que lo haré encantado."

Recordaste sus palabras y eso te hizo inmediatamente sonreír. El hecho de que te de tu espacio y tiempo te hacía sentir tranquilo, en paz. Él iba a esperar.

"Nibbla, por otro lado, es mi invitada especial en la cabaña, suele quedarse cerca de algunas de tus cosas y por supuesto, no se separa de Chimuelo."

Reíste, eran tan sociables, buenos amigos... Amigos ¿No?

- Muy bien señor enamorado. — Se aclaró la garganta para llamar tu atención. — No te volverás jefe si sigues con la mente en otras cosas.