La vida de Harry Potter no tiene un día de aburrida

Un retrato en la pared

Lo primero que salió de mis labios al entrar en la casa fue:

-Estamos jodidos.- Me dirigí a mis amigos. -Harry ya no es dueño de sus actos, un Lord maquiavelico y demente tiene control total sobre su mente y cuerpo y las cosas no pueden ser más horribles.-Dije con pesar.

-Recuerda que mató a 50 magos y brujas en los días que estabas inconsciente.

Miré a Blaise sin emoción.

-¿Y eso es relevante en el declive de mi poca estabilidafd, mi estrés y nerviosismo?

-Sí.- Respondió mi amigo.

-No.- Contradijo Pansy.

Los volví a ver. No había tiempo para desviarnos del objetivo.

-Necesito encontrar un cuadro, chicos.

Ambos me miraron en espera de más información.

No di ninguna.

Ellos me devolvieron la mirada.

-Un cuadro...- Repitió Pansy.

-En la mansión más grande del mundo mágico...- Siguió Blaise.

-Donde abundan miles de cuadros.- Terminó la idea la castaña.

Volteé los ojos.

-No sé a ciencia cierta donde debo buscar, pero mi madre me dijo a quien debo encontrar.- Mis amigos estaban a la expectativa. -Debemos encontrar a Walburga Black.

Ellos me miraron.

Blaise se rió, esperando que fuera una broma.

Pansy lo golpeó y le dijo que no lo era. Entonces fue en ese momento que Blaise puso cara de terror.

-¿Estás loco? Ni siquiera sabemos si está aquí en la mansión. Te recuerdo que muchos de los cuadros se perdieron y destruyeron en las redadas entre aurores y mortifagos hace años, mucho antes que Harry tomara como herencia esta mansión, según me contó mi amorcito nórdico,  que por cierto, es un bombón, ya les dije. Está muy preocupado por Harry, dijo que terminaba su misión y regresa para ayudar ¿No es perfecto? Bueno, pero no me desvío del tema. Además, ¿en serio me estás diciendo que quieres encontrar a la persona más clasista, racista, discriminadora y obsesionada por la supremacía sangre pura que ha existido después de Voldermort?

-Blaise tiene razón en algo, Draco.- Continuó Pansy. -Esa mujer, por rumores y palabras de nuestros padres era la reencarnación de la soberbia y la maldad, hasta su propio esposo le temía. Recuerda que exilió a uno de sus hijos por no pensar igual que ella y al otro lo tenía martirizado cada día hasta su último suspiro, antes de su muerte.

-Escuchen bien.- Les corté. -Si debo buscar al mismísimo Salazar en su tumba, donde quiera que esté solo por la posibilidad de encontrar una solución que me devuelva a mi maldito esposo a mi lado, lo voy a hacer.- Sí, dije esposo, porque en el momento en que este problema terminara, tomaría a Harry y me casaría con él, sea en una capilla o en el mismísimo bosque prohibido. Ya esta cansado de tanta mierda. -No me importa si era fanática o una loca sangre pura, les recuerdo que ninguno de los tres estamos en el lado bueno de las cartas en el mundo mágico. No me importa si debo quedarme días en este lugar, si mi madre me dijo que necesitaba de su ayuda y de sus conocimientos, entonces voy a buscarla, así deba mirar en los confines de esta mansión mil veces hasta encontrar su maldita presencia.- Mi respiración empezaba a volverse agitada. Estaba bajo mucho estrés y la responsabilidad de ayudar a Harry estaba marcada en mi corazón.