Capitulo 10

2.8K 485 81
                                    

  Vibraciones sobre la mesa...

No sabía si estaba soñando o era real. Solo quería seguir durmiendo. Abrió los ojos con pereza y tomó el celular para contestar.

— Mmm...

— Qué sexy — era Jimin.

— Estaba durmiendo — habló con una voz tremendamente ronca.

— Voy a ir a la universidad.

Se sentó de golpe — ¿Qué mierda?

— No revisamos los cuadernos de Yoongi. Puede que haya algo ahí.

— Hablé con él director, hoy. El casillero fue saqueado. Después de que sacamos el sobre, se llevaron todo.

— No puede ser...

— Yo tengo otra idea. ¿Puedes ir por la mañana al estudio donde voy a trabajar?

— ¡Sí!, s-solo dame la dirección.

— Bien... Ve como a las ocho.

— Vale, ahí estaré. Descansa, Kook.

— Descansa, pequeño.

— Espera... No cuelgues.

— Dime — se volvió a recostar, cerrando los ojos.

— No dejo de pensar en lo que pasó anoche... Me gustó tanto.

Sonrió — También me gustó.

— Me alegra saberlo...

— Sí...

— Te veré por la mañana.

— Adiós.

La llamada finalizó y Jungkook se volvió a dormir.

Sin embargo Jimin...

Ató los cordones de sus zapatos deportivos y colocó la gorra en su cabeza. Miró hacia atrás una última vez antes de salir y subir al taxi que lo llevaría a la universidad. En su mano sostenía con fuerza el llavero que Jeon le había dado y trataba de regular su respiración.

Tenía que ver con sus propios ojos que el casillero no tuviese nada.

— ¿Puede esperarme mientras busco algo y luego me lleva de vuelta a casa? — le preguntó al conductor. Este pareció dudar pero al final asintió.

— Pero rápido.

— Sí, señor. Ya vuelvo.

Se bajó rápidamente y buscó cómo entrar. La puerta principal estaba cerrada, pero alguna ventana debía seguir abierta.

Dió la vuelta, rodeando la instalación hasta que vió una ventana de un aula, semi abierta. Con los nervios de punta, la empujó hacia arriba y entró.

Sacó su celular para iluminar con el flash mientras, también grababa. El área de los casilleros no estaba tan lejos, por suerte. Todo estaba oscuro y en silencio. Caminó mirando siempre hacia atrás y a los lados hasta que estuvo frente al Locker. Puso la clave memorizada y abrió.

Había un sobre.

Con manos temblorosas lo abrió y leyó "Así que decidieron volver... ¿Quien de los tres conseguirá esta nota? — ¿Tres? — no debieron llevarse sus pertenencias. Sin embargo les daré un regalito. La próxima muerte será pronto"

Un ruido lo hizo jadear y mirar a todos lados. Guardó la carta en su bolsillo y apagó el flash, corriendo hacia el salón por dónde había entrado, para salir rumbo al taxi.

Su corazón latía a una velocidad abrumadora y miles de escenarios pasaban por su mente.

Debía avisar a la policía.

Chromatic Love - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora