Chromatic Love - Kookmin

Capitulo 31

  Mientras la noche se hacía más profunda, las calles se tornaban más vacías. Jimin iba abrazando a Jungkook por la cintura, con la mirada perdida.

— Estás muy callado — le acarició la pierna.

— Solo pienso en las posibilidades.

— No dejaré que te hagan nada.

— ¿Y qué hay de ti?

— Puedo cuidarme solo.

— Siempre dices eso...

— Porque es verdad. Mi prioridad eres tú y no dejar que esos hijos de puta te hagan algo malo.

Suspiró y lo abrazó más fuerte.

Sentía muchas cosas por él.

Mientras más avanzaban, el entorno iba cambiando. El nivel de riqueza era menos alto y los murales y callejones con grafitis y pinturas se alzaban en la oscuridad.

— Tiene que ser aquí — miró el mapa en su teléfono.

— Busquemos algo que nos indique nuestra entrada.

— ¿Puedes releer el acertijo poco a poco, por favor?

— Claro — sacó la carta— "En el corazón de la ciudad hay un lugar oscuro y estrecho...

— Estamos en el centro, lo que quiere decir que este es el corazón y el lugar estrecho sin dudas debe ser un callejón... Sigue.

— Las paredes hablan a través de imágenes, expresando sentimientos de personas que proyectan sus ideas a través del arte; tal y como lo hace el líder.

— El líder expresa su arte con pintura, como lo hizo con el cuerpo de Yoongi, sin embargo aquí no parece haber ningún cuerpo...

— Encuentren la puerta detrás del grafiti y viajen veinte años al pasado"

— Es el callejón más oscuro.

— Y en ese callejón tiene que haber un grafiti similar al arte del líder, es decir:

— Una persona bañada en pintura — dijeron al mismo tiempo.

Jungkook cerró su casco y dió varias vueltas, analizando cual era el callejón con menos luz. Hasta que dieron con uno que les llamó la atención. La pared derecha era de puro arte abstracto con colores monocromáticos, variando siete veces la tonalidad y en la pared izquierda se dibujaba una silueta con un solo ojo emanando una especie de energía multicolor.

Se miraron, tomaron aire y sujetaron sus manos — Pase lo que pase, siempre mantente a mi lado — dijo Jeon.

— No me soltaré — reforzó el agarre.

El siguiente paso era encontrar la puerta. Al haber tantos colores no se distinguía una separación. Tampoco había ninguna manilla.

Jimin alumbraba con su teléfono y Jungkook tocaba la pared, buscando algún relieve.

— Mira esto, Kook — el rubio señaló — es una escrito. Pero parece estar al revés.

El pelinegro le tomó una foto y giró la imagen — "En un muro de arte y color, una puerta se oculta al espectador... No me jodas la maldita vida es otro puto acertijo del jodido infierno, maldita sea — vociferó. Jimin le quitó el teléfono para seguir leyendo mientras Jungkook maldecía.

— No brilla, ni resalta, pero siempre está allí. ¿Cómo puedes encontrarla? La respuesta está en tus manos, solo tienes que tocar la nota que no se puede pintar", ¿qué cojones significa eso?

— Esto es un puto juego, estoy muy enojado.

— Cálmate — le sostuvo las manos — podemos con esto... Somos los mini espías ¿Recuerdas?