Capitulo 37

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  Entonces el director de la universidad resultó ser el líder de la secta y Dayun era una de sus peones. No bastando con eso, su misión era terminar con la vida de Jimin, ¿pero por qué?

Después de darle el nombre de la persona con la cual tenía que acabar, salió cada uno por su lado, sin darse cuenta de que la pareja los escuchaba y veía.

El rubio se sentó tratando de no correr detrás de ella y matarla,; Jungkook también estaba en shock.

— ¿Cómo sabía Yoongi que ellos estarían aquí y como supo el momento exacto en el que debíamos grabar? — dijo el mayor.

— Porqué estoy aquí — se acercó, vistiendo una gran chaqueta, con una gorra y tapabocas. Bajó el barbijo y se sentó junto a ellos.

Todo lo hablaban con voz muy, muy baja.

— ¿Y era tan difícil grabar tú mismo? — se quejó Jeon.

— Si me acerco y me llegan a ver o a descubrir, el plan se va a la mierda — miró a Jimin — escúchame, ella no te hará nada porque tienes un pie adelante. Estuvimos hablando con Lee Know y decidimos que no era buena idea asesinarlos, sino retenerlos a todos. La exposición de la secta y lo que han estado haciendo durante años será presentada al público y tomaremos una cadena nacional para eso.

— ¿Cómo la detengo? — preguntó el más bajo con determinación.

— Lo siento pero aquí jugará Jungkook... Sabemos que ella se siente muy atraída por él y es nuestro recurso más grande en este momento.

Jimin lo miró con una ceja elevada y en total desacuerdo — ¿Piensas poner a mi hombre a seducirla, maldito idiota?

— Wow... Su hombre — miró con diversión al pelinegro que también estaba evitando reír.

  Al menor no le hacía gracia — Prefiero que se muera esa zorra. Ya tuve mucho con verla tocar sus brazos. Por poco y se arrodillaba en frente de la discoteca a chuparle la polla, y tú — se dirigió a Jungkook — la dejabas que te tocara.

— ¿Quieres hablar de eso delante de Yoongi?, pues hagámoslo. Tú llegaste al lado del imbécil de Min-gyu, después de que te fuera a buscar en tu casa. Te habló al oído toda la noche y tú no te quitabas.

— Sabes porqué lo hice.

— Me importa una mierda.

— Bien, bien. Si quieren pelear o follar o hacer quien sabe qué otra cosa; pueden esperar a que yo me vaya y escuchar el jodido plan. Tenemos que sacar a Dayun del juego antes de que actúe en contra de Jimin.

— Lo haré, solo dame las instrucciones — dijo Jeon.

  El rubio estaba de brazos cruzados mientras movía rápidamente un pie. No quería al mayor cerca de esa mujer.

— Bien. Presta atención...



                                 -

  Botó el humo por su boca y nariz, relajando la cabeza hacia atrás. Esa parte de la universidad siempre era cómoda para fumar. El timbre del receso se escuchó y los alumnos comenzaron a salir. Él no había entrado a clases.

A lo lejos vió a la chica y con un gesto moviendo la cabeza, la llamó. Ella miró a ambos lados y se señaló preguntando "¿A mí?", Jungkook asintió.

Rápidamente se acercó y se sentó a su lado — ¿Todo bien?

— Sí, es solo que llevas días sin hablarme como debería ser.

— Oh, es porque siempre estás con Jimin.

— Eso no impide que tú y yo seamos amigos, ¿o te importa? — la miró botando el humo.

Chromatic Love - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora