Me enamoré de una Slytherin

1. El pasado de Pansy

EDITADO.

•4 años antes•

Pansy se encontraba en su habitación de Hogwarts empacando sus cosas para ir a buscar a su madre y devolverle la memoria, puesto que después del incumplimiento de su padre, por no querer que la marcasen y ser asesinado frente a los ojos de su hija por Lord Voldemort, Pansy se vio obligada a modificar la memoria de su madre y llevarla a un lugar seguro y que mejor lugar alejado de la magia que el mundo muggle.

Ella siempre estaba al pendiente del estado de salud de su progenitora y hacía un mes atrás le habían dicho en un hospital que ella, aquella mujer que le dio la vida, tenia una enfermedad terminal.

P. V. O Pansy

Yacía sentada a la orilla del pequeño lago que había en la mansión, me preguntaba por el estado de salud de mi madre, tal parecía, según lo que me informaron el mes anterior, se encontraba al borde de la muerte. Me puse en pie y con la debida concentración, aparecí en la casa muggle donde ella residía, tal vez no me recuerde pero debo verla. Era mayor de edad por lo que sin problema podía usar mi varita, claro, siempre y cuando con precaución, desaseguré la puerta trasera y me adentré en la sala y tal parecía que todo estaba vacío, continué caminando y subí a la segunda planta; caminé despacio en dirección a su recámara, tomé con cuidado la perilla y abrí la puerta. Allí se encontraba ella, todo indicaba que estaba durmiendo, me acerqué con suma cautela y la observé detenidamente, no había cambiado mucho, salvo quizás por el color de su cabello y que lucía un poco más delgada, sonreí al verla y una lágrima escapo de mi ojo izquierdo, no me inmute para limpiarla, como me gustaría que ella me recordara y se sintiese orgullosa de saber que su hija se gradúa de la escuela de medimagia, que ella estuviera ese día allí.

-Mami, ¿puedes abrir tus lindos ojos?- le pregunté en un susurro. Al parecer fue lo suficientemente audible pues ella se sobresaltó y abrió sus ojos, me miró un tanto confundida, después preguntó.

-¿quién eres tu?- le miré con tristeza,  mis ojos ardían a punto de soltar un par de lágrimas más y en un débil susurro le respondí.

-soy tu hija- a lo que ella me respondió.

-mientes, mis hijas y su padre murieron hace tres años- a lo que yo negué, saqué mi varita y le apunté con ésta y dije el contrahechizo y sin más desaparecí de allí.

Volví a la mansión. Y me puse a llorar, lloré como nunca. Horas más tarde escuché un ruido, sujeté mi varita con fuerza y caminé hacia el lugar en el que se escuchó, fue entonces que la vi allí parada. Caminé y ella me vio, sonrió y entonces me abrazó; pasaban los meses y mi madre recordaba algo nuevo, si, ahora vivía conmigo en la mansión. Un día ella se desplomó en su cama al intentar ponerse en pie, le mire preocupada, hice que fuéramos a San Mungo, el medimago no dio un buen pronóstico.

Le quedaban unos días de vida.

Regresamos a la mansión y prometí que la cuidaría.

•Dos semanas después•

Hoy era el día en que me recibiría en la escuela de medimagia**, les dije que no asistiría puesto que mi madre se encontraba mal, mi asesor me dijo que solo por esa ocasión podría hacer la ceremonia en mi casa, le di las gracias y me preparé y una vez ya todo listo entre con los encargados de la ceremonia a la habitación de mi madre, ella esbozó una sonrisa leve y me miró, pude percibir en su mirada un toque de orgullo, le sonreí de vuelta.

Terminó la ceremonia, ellos se fueron y yo abrace a mi madre, lloraba, ella correspondió el abrazo débilmente y me susurró.

-tu padre también estaría orgulloso cariño, lo lograste Pansy, ahora puedo irme en paz- la miré.

-te quiero madre- fue lo último que dije antes de que sus lindos ojos verdes se cerrasen para siempre...

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*Pansy sí se graduó de la escuela de medimagia pese a no haber culminado sus estudios en Hogwarts debido a que se dieron cuenta de los dones curativos que ella poseía*