Recogiendo las piezas rotas

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- Oh,Sarabi,me asustaste - Le dijo el león al voltear a verla - Solo estaba hablándole a las estrellas.

- ¿Sobre qué? ¿O es algo privado? - Preguntó la leona.

- No es privado,es sobre Taka - Le contestó el león.

- ¿Qué pasa con el? - cuestiono la leona.

- Bueno,sé que él siempre ha sido muy temperamental,pero últimamente ha sido muy distante - Le confesó el.

- Taka sólo ha entrado a lo que mi madre llama "difícil adolescencia". Así llama ella a la actitud de Naanda. Ella dice que los leones y leonas jóvenes la sufren cuando sus hormonas los confunden y normalmente se animan cuando crecen - Le explicó ella al león de melena roja.

- ¿De verdad? - cuestiono este.

- ¡Si! Aparentemente. Tú padre fue un león bastante molesto cuando era joven también. Pero mamá dice que cuando creció se animó. ¡Y míralo ahora! Es feliz,¡Tuvo cachorros,y es un gran rey! - Le informó ella.

- Wow,tal vez sea cierto. Al menos me da esperanza. Gracias,Sarabi,siempre sabes que decir - Respondió el.

- Haría cualquier cosa para mantenerte sonriendo,Mufasa. No me gusta verte triste. Me.... Me importas mucho.... - Le dijo la leona.

- Y tu también me importas.... - Le respondió el león para después frotar su cabeza con la de la leona.

Sarabi y Mufasa florecieron desde ese momento, y pronto se volvieron pareja. Todos lo vieron venir,incluso Taka,quien encontraba el asunto irritantemente repugnante. Cómo odiaba tanto a su hermano feliz,se burlaba de Sarabi,sin embargo,tuvo que admitir que todo el asunto le dio mucho que pensar.

Viendo lo feliz que Mufasa estaba con Sarabi,Taka se preguntó si el amor le daba esa felicidad a todos los leones. Si el amor pudiera traerle felicidad a él. Y comenzó a pensar acerca de cierta leona que siempre había estado en su corazón. Quizás,con Sarafina a su lado,las cosas cambiarían para el. Tal vez,la felicidad era una realidad que él podía tener. Y al final,decidió dar por fin un paso adelante.

- ¿Entonces no quieres unirte a tu padre y hermano hoy? - Le preguntó la leona.

- No.... Sólo asisto a ciertas lecciones. Y cómo parece que Sarabi será la futura Reina,ella se les unirá y no quiero estar alrededor de la desagradable pareja - Le respondió explicó.

- Pero deberías sentirte feliz por ellos,Taka. Quiero decir,es tu hermano - Respondió ella.

- Supongo,al menos me ha hecho tener algunos pensamientos felices - Le confesó el león.

- ¿Oh de verdad,cómo cuáles? - Cuestiono la leona.

- Uh.... Bueno. Me importas mucho,Sarafina - Le confesó el león de melena negra.

- También me importas,Taka. ¡Eres mi mejor amigo! - Le dijo la leona.

- No,quiero decir,más cómo una amiga - Le confesó el.

- ....Oh.... - Le dijo la leona sin saber que respondería.

- No creo que me haya importado tanto alguien como me importas tú - Le respondió el con una cálida sonrisa.

- Taka,no se que decir - Dijo la leona encogiéndose de hombros.

- Di que te sientes igual, y seré feliz - Le pidió el.

- Taka,me importas,Pero.... No de esa forma - Le dijo ella bajando la mirada.

- ¿Qué? - Respondió el León desconcertado.

- Siempre has estado hay para mí, y te quiero por eso,pero te quiero como a un hermano. Pero.... No más que eso - Le explicó la leona.

- Ya veo... - Dijo el león mientras cerraba sus hijos y sentía cómo se rompía su corazón.

- Taka,lo siento. Nunca he querido herirte - Le dijo la leona acercarse a él.

- Solo déjame solo - Dijo el león mientras empezaba a irse.

- Taka,por favor no seas así - Le pidió la leona mientras lo seguía.

- ¡Dije que me dejes solo! - Le gritó el león para luego salir corriendo.

Taka después de lo ocurrido se había tirado a la sombra de un árbol,pensando en lo ocurrido hasta que alguien dijo.

- Pensé que había percibido el olor de algo sucio -

- Vete,no estoy de humor - Le respondió él a la leona de color amarillo que se acercaba.

- ¿Desde cuándo estás de humor para algo? ¿Qué te molestó esta vez? ¿Mufasa? ¿Qué hizo ahora? ¿Vencerte en una pelea? ¿Ser muy amable contigo? O solo el hecho de su existencia - Cuestiono la leona.

- ¡No es Mufasa! Es Sarafina.... Ella.... - Dijo molesto el león antes de cerrar sus ojos por la impotencia ante la atónita mirada de la leona.

- Ohhh,te rechazó, ¿No? - Se burló ella.

- ¡Cállate y vete! - Exclamó el.

- Taka,no es el fin del mundo... - Le dijo ella.

- ¡¿Qué vas a saber tú?! ¿Qué a la persona que te importa,no le importes? ¿Conoces ese dolor? - Cuestiono el levantándose.

- ...Si... - Respondió ella fríamente.

- Oh si claro. ¿Cómo podría a ti importarte algo con ese corazón frío que tienes? Mufasa,lo siento,Naanda, el ya fue elegido por.... Todos los demás.... - Le informó el joven león.

- ¡No Mufasa,tu idiota! Yo me preocupo .... Por ti - Respondió la leona ruborizada.

- ... ¿Que? ... - Cuestiono el.

- Ya me escuchaste - Respondió ella aún con la cara roja.

- Estoy confundido... - Le dijo el.

- Somos los mismos,tú y yo. Menospreciados,nadie ve nuestro verdadero potencial. Quienes nos importan ni siquiera nos notan... - Indicó la leona.

- ¡Para! ¡Me has tratado como basura toda mi vida! ¿Cómo es posible que te preocupes por mí? - Cuestiono el.

- No sé cómo ni porque me importas,pero lo haces.... Entonces,tienes dos opciones.... Déjame quedarme contigo.... O .... Puedo irme - Le ofreció ella - ¿Bueno?

- ¿Quédate? - Le dijo el para que luego esta se acercara a él.

Más tarde ese día,Taka se encontraba dormido,hasta que una voz lo volvería a despertar.

- Té vez triste -

- Viccha?! - Dijo el león sobresaltado - ¿Qué haces aquí? ¡Es peligroso para ti estar en las tierras de la manada!

- Bueno,un pajarito me dijo que estabas deprimido, y no puedo tener a mi Taka triste - Dijo ella levantando su cabello,así dejando ver su ojo bueno.

- Dile a Mortimer que deje de espiarme - Le dijo él a la hiena.

- Me alegro de que te espíe,porque ahora puedo consolarte ¿Qué pasó? - Le dijo la hiena del ojo rojo.

- Hablé con Sarafina, y ella no me quiere como yo la quiero - Le confesó el.

- Oh.... Lo siento,Taka, ¿Pero no te dije que esto pasaría? - Le preguntó la hiena.

- Si.... Lo hiciste.... - Respondió el bajando la cabeza.

- ¿Y me escuchaste? - Preguntó ella con una sonrisa.

- No - Respondió el.

- Entonces estaba en lo correcto. Las leonas no son más que problemas. Siempre estoy en lo correcto... - Le reprochó ella.

- Bueno.... Puede que estes en lo correcto con Sarafina,pero Naanda....  Dijo el antes de ser interrumpido.

- ¡¿Naanda?! ¿Te refieres a la tinta leona que te causo tanto dolor? - Le reprochó la hiena.

- Si,pero.... Ella vino el otro día. Dijo que le gustó.... Quiere estar conmigo - Le explicó el.

- Oh Dios,Taka.... No lo—

- puede que si... - respondió el antes de que terminara de hablar.

- Taka,tonto! Ella no es diferente a Sarafina. De hecho,es peor. ¡Se abalanza sobre ti mientras eres débil para aprovecharse - Le dijo la hiena molesta.

El Rey Leon:La Historia Jamás ContadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora