Muriel miraba el teléfono mientras caminaba cabizbaja, hace unas semanas se mudo a Seúl para poder llevar a cabo sus estudios de sonidista, consiguió un trabajo de medio tiempo, conoce nuevas personas que eran simpáticos con ella, pero a pesar de que todo le estaba saliendo bien, se sentía vacía y triste.
Quizás, la razón de ello era su pelea con Han hace un poco más de un mes, desde aquella fecha que no se hablan y ninguno ha hecho el mérito de acercarse al otro.
Totalmente orgullosos.
Pero ahí la tenían, desgranada caminando hasta su departamento mirando el teléfono en dónde estaba la fotografía de ella y Han sonriendo cuando todo estaba bien.
Molesta por todo lo que ha pasado, bloqueó el teléfono y casi lo tiró en el interior de su bolso, levantó la mirada y se detuvo de golpe por el asombro que se llevó.
La sonrisa se dibujó en su rostro, y sin pensarlo siquiera comenzó a caminar apurando cada paso sin que se notará mucho.
— Hola, Yeppeun —se escuchó ahogado debido a la mascarilla en su rostro.
— Ya~... ¿Quién diría que soy la amiga de un artista? —rieron— ¿Qué pasa si grito que Jeon Jungkook está aquí? —susurro traviesa.
— Seguro no podré venir a verte nuevamente —respondió de la misma forma y juntos caminaron lo que quedaba de camino.
El chico siempre le ha gustado a Muriel y tenerlo en su vida hacía que el dolor por Ji Sung se desvaneciera al menos por esos momentos.
— Noona, apaga tu estúpida alarma —se quejó entre dormido— Es tu teléfono el que suena, el mío está apagado —reclamo ella tomando un pequeño cojín golpeando a Han en la cabeza.
Este abrió un ojo mirando su mesita de noche y apagó la alarma.
— Abrázame Ji Sung —pidió bajito mientras retoma el sueño.
Hannie giro en su lugar, levantó la sábana que los cubría y se apegó a ella besando su hombro desnudo. Pero al sentir el contacto de piel con piel se separó abruptamente de ella, asustado cubriendo su cuerpo con vergüenza.
— Noona, estamos desnudos —dijo entre titubeos y espantando el sueño de él.
Y ahora, el de ella.
— ¿Y que más quería a después de… —abrió sus ojos y pensó un momento— Han Ji Sung, ¿No recuerdas nada?
— ¿Crees que si recordara estaría actuando así? —dijo casi en un grito.
— Woa —se arrodilló en la cama con su cuerpo desnudo y una que otra marca producto de lo sucedido la noche anterior— Tienes que estar jodiendome —le reclamo quedando frente a él, con la mirada de decepción por la situación.
La mirada de Hannie iba de cualquier punto de la habitación hasta el cuerpo perfectamente lechoso y desnudo. Sin embargo, el acto que estaba tomando solo hacia que Muriel se arrepintiera de lo pasado, la miro directo a sus ojos y noto como estos se enrojecian y llenaban de lágrimas.
— Yeobo —de un movimiento acortó la distancia entre ellos— perdóname ¿sí?, soy un bruto —le habló con cariño— es que, nunca me he acordado de lo que hago o digo cuando me embriago.
— No fue tan importante —respondio en un hilo de voz.
— Claro que sí, fue muy importante porque fue nuestra primera vez juntos, y la había imaginado tantas veces que no sé que hice ni como fue —ella sonrió tiernamente y avergonzada.
— Si te dijera lo estúpidos que fuimos no me creerías.
— ¿A sí?, bueno, creo que deberíamos formar un nuevo recuerdo, y quizás no cometer los mismos errores que anoche, ¿Que dices?
— ¿Hablas de repetirlo o hacerlo mejor?
— Ambas, repetirlo pero haciéndolo mejor —sus manos se entrometieron entre los muslos— Yeobo —comenzó a besar su cuello.
— Ji Sungie —salio en un gemido.
Los labios se encontraron para devorarse el uno con el otro, tocándose mutuamente, subiendo la temperatura, deseándole, poseyendo el cuerpo del otro y dejándose llevar por sus sentimientos.
Wattpad me bajo un capítulo, el anterior a este, lamento que se lo perdieran pero ya está disponible.
Lo siento mucho
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VerSus -terminada-
RandomMuriel esta atrapada en dos amores de infancia, y aunque niega sus sentimientos, estos muchachos voltearan su mundo. ★Historia corta. ★Capitulos en extremo cortos. ★ Bangtan v/s Stray ★mejores amigos. ★enredos amorosos. ★ nombramientos de otros...