— No salgas con Han —le pedí con el corazón en la mano— terminaré con Lisa, estaremos juntos —prometí
— ¿Quién dice que quiero estar contigo? —sus palabras estremecieron mi corazón, pero sabía que era todo lo contrario
— De no querer no me habrías besado, y tu ritmo cardíaco está muy rápido, debe ser por mí —sonreí al ver ese color en sus mejillas, es la típica reacción de Muriel cuando la descubren en algo.
— Egocéntrico —dijo con un puchero y se soltó en mis brazos
— Este egocéntrico está loco por ti —solté las palabras y devoré su boca.
Pero mi acto en vez de ser sensual para ella fue algo divertido, tanto que interrumpió nuestra unión con una risa que no pudo controlar.
¿Me molestó?, no, me encanta verla sonreír y más si soy yo la razón. ¿Me sentí ridículo?, obviamente.
—Ya~... Jeon Jungkook, eres tan cursi —enrollo sus brazos en mi cuello— no conocía está faceta tuya.
— Hay muchas cosas que no sabes de mí —la tomé como princesa en mis brazos— ya tendremos tiempo para ello.
— ¿Dónde me llevas? —pregunto cuando pase por la sala— mocoso pervertido —su rostro se puso rojo como tomate— ¿Por qué me traes a tu cuarto?
— No hagas escándalo, sé muy bien que quieres —la senté al centro de la cama y me quedé arrodillado frente a ella, observando como sus nervios florecían en cada poro, descubriendo su actitud.
— Eres un… ¡sucio!, olvidas que soy mayor a ti, podría darte una lección.
— Dámela —me acerque a ella, retrocedía manteniendo distancia de mí— Pero ahora —quedo recostada—Vamos a descansar —me deje caer a su lado sonriendo por dentro.
Abrace su cuerpo no sin antes cubrirnos y bese su mejilla.
— ¿Dormir?
— ¿Para qué más es la cama?
— Bueno pues, hay, hay muchas cosas que se pueden hacer en la cama.
— ¿Y yo soy el pervertido?, acabo de decirte mis sentimientos y crees que te tomaría ahora mismo —acaricie su mejilla— no te niego que las ganas me matan, pertenecerte y profanar tu cuerpo —otra vez ese color en sus mejillas— Pero haré las cosas bien, quiero citas, risas, paseos, regalos, momentos inolvidables, demostrarte que en serio me encantas, demostrarte que mis sentimientos son reales a tí.
— No esperaba más de mi conejito —se giró en mi dirección y descansó en mis brazos— Kookie, ¿Lo prometes?, ¿Prometes que la dejaras?
— Lo juro, hablaré con Lisa y terminaré con ella, ahora solo quiero estar contigo.
Abrazo mi cuerpo con tanta fuerza que se sintió asfixiantemente bien.
Pero, yo nunca cumplí con esa promesa.
Jimin abre la puerta de su casa, veo en su expresión la preocupación y también noto como sus labios se mueven contándome lo que sucedió, no logro conectar frases, solo algunas alcanzo a procesar como “Venía de Busan”, “la ví caminar por la carretera” y finalmente “llame al doctor Hwang para que la revise y todo está bien” y mientras me indicaba todo me guiaba al cuarto de invitados.Estando en la puerta suelta un suspiro y me mira fijamente.
— ¿Quieres que me vaya a tu departamento?
— ¿Qué debo decirle?
— No deberías decirle nada, no le preguntes, si ella te quiere contar lo hará, solo, quédate con ella y apoyala.
— Gracias Hyung
— Llámame si sucede algo.
— Nos iremos a mi casa, solo dame tiempo para convencerla.
— Como quieras —tocó mi hombro y apretó con algo de fuerza.
Abrí la puerta con valentía, la habitación estaba oscura y solo entraba la luz de afuera por las cortinas, un pequeño bulto estaba en piso apoyado a los pies de la cama, con sus rodillas en su pecho y la cabeza entre ellos, escondiéndose, protegiéndose y evidentemente afectada.
Cuando la puerta cerró ella levantó levemente su cabeza, relajo un poco su cuerpo y se levantó del piso para acercarse a mí,abrazándome, dejando su cabeza descansar en mi pecho, es allí donde llegaba y me encanta porque está más cerca de mi corazón.
— Perdóname —dijo y no comprendí nada.
Mis manos intuitivamente se movieron por su espalda y la abracé, no me había dado cuenta de cuánto enloquecía por este acto.
No me había dado cuenta de cómo mi corazón latía por ella, con tanta fuerza que podría romper mis costillas, o de cuánto adoro el aroma que suelta su cuerpo o cuerpo cabelludo.
Mi cuerpo sintió una congoja por sus palabras, sonaron templadas y a la vez temerosas, se estaba despidiendo, de eso estaba claro, y lo peor de todo es que no pude demostrarle cuanto es que la quiero conmigo, cuánto la necesito y cuánto me hace bien.
Cuando estaba en la primaria me prometí que al ser mayor le declararía mis sentimientos, al estar en la secundaria me dije que no estaba preparado para llegar a su altura de mujer, yo debía madurar muchos aspectos de mi vida. Cuando fui famoso prometí declararme pero no lo hice poniendo como excusa que primero haría dinero para que no le faltase nada, y no me dí cuenta que la estaba perdiendo al yo estar con otra por la que nunca tuve sentimientos.
No recuerdo el momento exacto en que escuché su declaración de amor, o en qué momento dijo que yo le gustó o que me quiere, no recuerdo que correspondiera a mis sentimientos simple y llanamente porque ella nunca lo dijo.
Entonces lo supe, fue ahí cuando finalmente lo reconocí, yo, Jeon Jungkook, amo a Muriel y es realmente malo.
La amo desde que la conocí, su sonrisa a la que le faltaba un par de dientes, la forma en como dice mi nombre o como toma mi mano, amo como me regaña reclamando derechos por ser mayor, siendo solo un par de días antes su cumpleaños, amo que provoque tantas cosas en mi cuerpo que se me haga difícil de controlar y por muy lamentable que suene, amo que nunca me diera oportunidades ni esperanzas porque esto es malo…
Es malo porqué, ella ama a Han Ji Sung y no se cómo reponerme a un corazón roto
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VerSus -terminada-
RandomMuriel esta atrapada en dos amores de infancia, y aunque niega sus sentimientos, estos muchachos voltearan su mundo. ★Historia corta. ★Capitulos en extremo cortos. ★ Bangtan v/s Stray ★mejores amigos. ★enredos amorosos. ★ nombramientos de otros...