Lo verdaderamente difícil [Xiao X Aether] [Lyney X Aether]

24- Cerca

♦ Escenas de sexo narradas explícitamente.

París, Francia

Usualmente las parejas al tener que festejar algo lo hacen de cierta forma bastante peculiar, Lyney y Aether no son para nada la excepción.

— Está vez no te escapas de mi, Mon Éclat. — Decía Lyney con sus labios muy cerca de los de Aether.

Lyney pasaba sus manos por sobre la esbelta y agraciada figura de Aether posándose sobre sus prominentes caderas para posteriormente introducir sus manos justo debajo de sus ropas acariciando aquel bello y firme trasero provocando que Aether soltara un leve gemido placentero.

Sus bocas luchaban por ver quién tiene el control esta vez, por ver quién recibirá y quién dará, ambas lenguas bailan abriéndose paso la una a la otra dejando detrás de si un hilo de saliva que al separarse es lo único que los une.

Entonces se miran con todo el deseo carnal que puede existir, las pupilas de ambos se dilatan y la respiración se entrecorta.

— Es mi turno... De ir arriba, quiero que me complazca esta noche, Mon amour.

Lyney sujetó firmemente el mentón de Aether para que lo viese directamente a los ojos marcando también cierto dominio sobre él.
Acatando órdenes, Aether desabrochó uno a uno los botones de la camisa de Lyney sin dejar de seguir el ritmo en un nuevo beso que desearían no acabase nunca.

Aquella camisa voló a alguna parte de la habitación, el pecho no tan marcado de Lyney subía y bajaba debido a su dificultad para respirar.
Aether lo tiró a la cama sujetando firmemente las manos de su pareja por sobre la cabeza de este, era obvio quién es más fuerte, Aether ejercía presión hasta dejar marca, posteriormente con su mano libre, repasó con su dedo índice desde el ombligo hasta su erecto miembro atrapado en una prisión de tela rogando por salir.

Palpita buscando atención, la ruega, la implora con toda su alma.

Aether desabrocha el pantalón y lo baja un poco, ahora lo único que los separa es la ropa interior un poco húmeda debido a la excitación elevada.

Una mirada cómplice dio a lugar que Aether siguiera con su acto morboso.

Tomo el miembro erecto por sobre la ropa inferior acariciando una y otra vez, subiendo y bajando, observando como con cada movimiento, Lyney perdía lentamente la cordura.

— Y-Yo dije que iba a ir... Arriba.

— No esta vez, bǎobèi.

Lyney no contento con esto, sonrió ladino y a punto de cometer una pequeña travesura con su pareja.

Se libró del agarre, tomó a Aether por el cuello apretando ligeramente el mismo.
Estaba claro quién lleva el mando en esa ocasión y Aether comprendiendo que había perdido, se dejó hacer.

— No Mon Cheri, dije... Yo voy arriba. — Aquel tono dominante hizo caer a Aether completamente.

La lengua del mayor se deslizó sensualmente por el cuello blanco, unas pequeñas mordidas aquí, marcas de besos allá... Un chupete en un lugar demasiado visto también.
Lyney hizo a Aether dar media vuelta quedando este con sus caderas levantadas mostrando su sensual trasero, la vista fue exquisita para él, tan redondo, carnoso y tan suyo, algo que agradecía mil veces poder comer cuántas veces quisiera y donde quisiera.

— ¿Sabes a quién pertenece esto? — Preguntó Lyney sujetando con firmeza ambos glúteos.

— N-no... — Contestó apenas audible.