Ese era el miedo de estar cerca de Freen: algún día ella bajaría su guardia y la pelinegra percibiría algún desliz.- ¿Qué? - preguntó Becky incrédula. - ¿Te volviste loca?
- ¿Cómo sabes de mi padre? - volvió a preguntar Freen con solemnidad. - La castaña cerro los ojos para enjuagar el acondicionador del cabello.
- No pondría a una violadora o asesina en serie en mi celda, así que le pedí a Noey que sacara tu ficha. - Becky habló y Freen la miró escéptica.
- ¿Viste el crimen del que fui acusada? - preguntó Freen incrédula.
-Si. - Becky dijo naturalmente.
- ¿Y aun así me trasladaste a tu celda? - le preguntó sorprendida.
- No, lo has soñado hasta ahora y vas a despertar todavía en la celda de Millie. - dijo Becky seriamente, cerrando la ducha antes de caminar unos pasos y buscar con la guardia dos toallas aún embaladas, habían olvidado agarrarlas.
- ¿Por qué iban a tener en mi archivo que mi padre está muerto? - preguntó Freen y Becky bufo.
- Es la puta policía federal. Ellos saben todo sobre ti. - dijo Becky y Freen aceptó la respuesta, apagando la ducha. Ella caminó hasta Becky y tomó la toalla de su mano, viendo a la castaña desviar los ojos hacia cualquier otro lugar.
- ¿Cuántos años tienes? - preguntó Freen, abriendo el envoltorio de la toalla antes de empezar a secarse.
- Suficientes.
- ¿No sabes contestar ninguna pregunta bien? - preguntó Freen y Becky suspiró.
- No es nada personal, ¿de acuerdo? Simplemente no quiero amistades. - Becky dijo y Freen asintió, vistiendo su ropa interior antes de ir a la puerta para recoger un conjunto de uniforme limpio con una de las guardias y dejar el sucio.
- Sabes que saber tu edad no me hace tu amiga, ¿verdad? - preguntó Freen, yendo al vestuario sólo para vestirse rápidamente.
- Pero sería un comienzo. - Becky advirtió.
- Así que tengo un buen comienzo de amistad con mis actores favoritos de Hollywood, necesito que lo sepan. - dijo Freen sarcástica y Becky volteó los ojos.
- Veintiuno. - dijo Becky por fin y Freen levantó la vista, soltando la toalla para ponerse la parte superior del uniforme.
- ¿Te dolió? - preguntó Freen sonriendo y la mayor frunció el ceño. -Decir tu edad. ¿Duele?
- Casi. ¿Cuál es la tuya? - preguntó Becky.
- ¿No viste mi ficha? - Freen le preguntó burlonamente y Becky volteó los ojos, terminando de vestirse antes de marchar a pasos agigantados a su celda, dejando a Freen sola allí.
La menor se rió para sí misma y terminó de vestirse, volviendo sin pizca alguna de prisa a su celda.
- Lo siento. - Freen pidió ver a la castaña peinando su cabello con una ceja. - Creo que tus caras son graciosas, pero no quise sonar grosera.
-No sonó. - dijo Becky seriamente y Freen asentó.
-Tengo veinticuatro años. - Freen mencionó, cruzando los brazos y sentándose en su cama. - ¿Qué más vio en mi ficha? - Ella preguntó temerosa.
- Nada. Sólo el hecho de conocer su crimen.
-No fue mi crimen, pero entendí. - dijo Freen. - Y sobre mi padre, ¿Cierto? - Freen preguntó y Becky asintió.
- Cierto.
- ¿Sabes qué es muy curioso? - Freen empezó a recoger su cepillo de dientes de sus cosas. - Que de todos los hechos allí, tu no recordaste mi edad, preferiste recordar que mi padre falleció.
- ¿Qué está insinuando? - preguntó Becky y Freen movió la cabeza, yendo hacia el pequeño lavabo de allí.
- Nada. Sólo que no creo que hayas visto mi ficha. - dijo Freen, viendo a Becky terminar de peinarse el pelo y sostenerla contra la pared antes de que pudiera llevar el cepillo de dientes hasta su boca.
Los ojos de Freen vieron el músculo de la mandíbula de Becky tensionado y sus ojos la miranron solemnemente. Su mirada bajó a los labios rosados de Becky antes de que sintiera que su pulso se aceleraba.
- Nunca dudes de mí. - dijo Becky firmemente y Freen fue audaz en su próximo acto, estirando de su cuello para estar más cerca de Becky antes de mirarla intensamente.
-Entonces dime, Armstrong... -Freen comenzó, con la voz cargada de poder. -Si realmente viste mi ficha... - humedeció sus labios. - ¿Cuál fue mi crimen?
Ella vio la vacilación invadir la mirada de la castaña y allí ella tuvo certeza: Becky no había visto su expediente.
Su razonamiento dejó de funcionar correctamente cuando un brazo de Becky rodeó su cintura y pegó mas sus cuerpos, causando una leve falta de aire en la pelinegra.
- Estás realmente conmovida por toda esta proximidad, ¿no? - preguntó Becky, sonriendo sugestiva. Su cara se acercó unos milímetros más a la de Freen antes de rozar sus labios con los de ella. -No es sólo protección para ti, veo la forma en que me miras... - Freen tragó en seco y se inclinó, dando un beso suave en la esquina de los labios de Becky. En los ojos de la castaña nació un brillo hipnotizante , pero ella se contuvo.
-No trates de persuadirme a olvidar nuestra conversación. - dijo Freen, volteando la cara cuando la castaña sonrió victoriosa y se inclinó. -Sin distracciones. ¡Quiero que me contestes! - Pidió con vehemencia y Becky la soltó, pateando el lavabo antes de suspirar y alejarse, subiendo en su cama.
- No conozco tu maldito crimen, ¿de acuerdo? Me atrapaste. - dijo Becky enojada. - Pero no me preguntes cómo sé lo de tu padre. No te lo voy a decir. - Dijo, recostarse y volteandose a la pared.
- Pero...
-Te dejé algunas cosas para comer en tu cama, después de todo te perdiste la hora de la comida con la doctora sexy. ¡Buenas noches!
Freen sonrió sin darse cuenta de que Becky seguía preocupándose por ella.
- ¿Becky? -Freen llamó.
- ¿Hm?
- Gracias. - Agradeció, empezando a cepillarte los dientes.
- De nada. -Respondió únicamente, intentando levantar la pared invisible que ella misma creaba entre ellas sin saber que Freen no aprendía la lección.
Cuanto más misteriosa, más atractiva a sus ojos.
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Me dormí sorry 🤡 el cansancio les dejare otro mas lo leen cuando se despierten 😅🫶🏻.
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PRISIONERA || FREENBECKY
De Todo¿Que harías si por un golpe del destino, fueras presa siendo inocente? Freen Sarocha no se asustó tanto cuando fue mandada a juicio, al final su familia tenía la cuenta bancaria desbordando de dinero lo suficiente para pagar el mejor abogado del pa...