- Entonces mañana vienes un poco más temprano y te quedas dos horas, ¿verdad? - La doctora Sasha habló y Freen asintió, viendo a la mujer sonreír gentilmente. - No pareces ser una mala persona.- Siempre he intentado andar en la línea, al menos. - dijo Freen riendo.
-Pero acabó cometiendo un desliz, ¿no? - La mujer insinuó y Becky suspiró.
- Si te dijera que estoy aquí injustamente no me creerías, ¿verdad? - preguntó Freen y la doctora abrió la puerta.
- Podría intentar creerlo.
-Es un comienzo. - dijo Freen. - Nos vemos mañana. - Ella habló, viendo a la mujer tenderle la mano antes de que ella fuera a la celda. Era la hora del baño.
-Tardaste. - Becky lo dijo de una forma no acusatoria. - ¿Muchos pacientes? - preguntó Becky curiosamente tan pronto como la pelinegra entró en la celda para recoger su ropa interior.
-No muchos. Ella me estaba explicando cómo funciona todo. - informó Freen. - ¿Me extrañaste? - La castaña miró a Freen antes de soltar una carcajada.
- Sigue soñando. - dijo Becky y Freen rió, saliendo de la celda con Becky en su búsqueda.
- ¿Te bañarás conmigo? - preguntó Freen y Becky arqueó una ceja.
- Me voy a bañar, pero no contigo. - replicó fríamente.
- ¿Entonces por qué me esperaste? - preguntó Freen sonriendo victoriosa y Becky sintió su rostro calentarse.
-No te esperé, fue una coincidencia. - Becky habló y Freen suspiró, conteniendo la risa.
- Gracias. -La pelinegra dijo y Becky la confundió. -Por cuidarme, ¿sabes? Millie anda por ahí suelta.
- ¡No te estoy cuidando, Freen! - dijo Becky firmemente.
- Está bien. - dijo Freen, abriendo la puerta del baño después de pasar por una guardia. - ¿Dime... por qué estás aquí? - preguntó Freen, dejando su pieza íntima en una esquina y llevando una mano hasta el dobladillo de la pieza superior de su uniforme naranja, quitándola.
Becky se ruborizó por primera vez frente a Freen al ver los senos perfectamente modelados. Sus ojos se desviaron hacia un punto fijo en la pared y Freen se rió bajito al notar la reacción de la castaña.
-No te voy a decir por qué estoy aquí. - dijo Becky secamente y Freen sonrió.
- Me lo imaginé, pero no costaba nada intentarlo, ¿eh? - preguntó Freen viendo a Becky quitarse la ropa también. La pelinegra ni siquiera notó su mirada cargada de lujuria hacia los pechos de Becky. Su vista se atoró varios segundos allí, hasta morder su labio inferior y alzar la mirada.
La castaña la miraban mientras una sonrisa maliciosa adornaba su rostro. Freen arqueó una ceja y abrió una sonrisa sugestiva, causando un suspiro en Becky, que abrió la ducha y entró debajo de ella.
- Entonces... - Freen comenzó, quitando el resto de su ropa antes de abrir la otra ducha. - ¿Qué fue eso? - Preguntó, metiendo la cabeza bajo el agua.
-Eso fuiste tu mirando mis pechos. - dijo Becky naturalmente y Freen se rió.
- Me refiero a tu coqueteo. - dijo Freen y Becky arqueó su ceja, parpadeando nerviosamente.
- No coqueteé. - dijo Becky.
- ¿Tu sonrisa maliciosa que indicó? - preguntó Freen, comenzando a enjabonarse.
- Que ahora sé que sabes que soy hermosa. - Becky dijo y Freen entrecerró los ojos, lanzándole agua a Becky .
-Eres una idiota. - dijo Freen
- Una idiota a la que deseas. - Becky sonrió victoriosa.
- Sólo porque miré tus pechos, ¿crees eso? -preguntó Freen y Becky asintió. - Pues quiero que sepas que me encantan los pechos, no importa el tamaño, así que digamos que encuentro tus pechos bonitos, no necesariamente a ti.
- ¿No me ves guapa? - Becky preguntó y Freen movió la cabeza.
- No te interesa. -replicó, dándole la espalda a Becky como una adolescente loca, lo que llevó a la castaña a dejar que sus ojos recorran el trasero desnudo de la otra chica.
-Tú coqueteaste conmigo. - Becky dijo y Freen permaneció de espaldas, lavándose. - ¿Qué fue esa ceja arqueada?
-Estaba viendo si compartíamos una idea, pero ya sé que no. - dijo Freen, haciendo que la curiosidad de Becky se agudizara.
- ¿Qué idea? - La castaña preguntó, limpiándose la garganta.
- ¿Qué te parece? - preguntó Freen, dirigiéndose a ella antes de arquear una ceja. Becky sintió su corazón latir frenéticamente contra su pecho, pero en su exterior su expresión era indescifrable.
-Creo que deberíamos bañarnos. -Habló por fin. - Ya se nos acaba el tiempo. -Freen se fijó en sus ojos antes de asentir.
- ¿Nunca nadie te visita? - preguntó Freen curiosamente, intentando cambiar de tema. La puerta del baño se abrió sólo por dos presas que encerraron sus baños en las duchas más lejanas de allí.
- Parece que estamos a mano. - dijo Becky fríamente y Freen asintió.
- Mi hermana se quedó con la custodia provisional de mi sobrina y no puede visitarme por ahora, hay una carrera enorme para ella. -Freen explicó.
- ¿Tienes una sobrina?
- Sí. - respondió Freen, abriendo la mayor de las sonrisas al recordar el rostro de la niña. - Ella cumplirá tres años en poco menos de dos semanas. - Habló, pasando champú en su cabello. - Si hubiera sabido que se quedarían con nuestras pertenencias le habría dejado mi collar favorito. Le encantaba porque tiene la forma de un corazón.
- ¿Es tu collar preferido por alguna razón? - Becky preguntó y Freen asintió.
- Me lo dio mi padre para que un día lo ocupara con la foto del amor de mi vida. - dijo Freen riendo. - Pero como esperaba, el corazón sigue vacío.
- ¿De qué corazón estamos hablando? - preguntó Becky riendo.
-De los dos. - La pelinegra respondió y Becky asintió.
- Lo siento por tu padre, por cierto. - Becky habló y Freen giró su cara bruscamente para mirarla.
- ¿Cómo sabes que mi padre murió? - Freen preguntó y Becky palideció.
- Tu... Tu lo dijiste, ¿Quien mas?.
-No, yo no. -Freen dijo seriamente.
- Dije que sí.
- Becky, estoy segura de que no lo hice. Odio decir que el murió; no se lo comento a nadie. - Freen dijo y Becky exhaló el aire de sus pulmones, haciendo que Freen estrechara sus ojos irritada. - ¿Has estado investigando mi vida?
Becky tragó en seco. Freen le había puesto en un callejón sin salida.
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PRISIONERA || FREENBECKY
Acak¿Que harías si por un golpe del destino, fueras presa siendo inocente? Freen Sarocha no se asustó tanto cuando fue mandada a juicio, al final su familia tenía la cuenta bancaria desbordando de dinero lo suficiente para pagar el mejor abogado del pa...